En respuesta, decidieron realizar una reunión paralela en esta ciudad india, antes conocida como Calcuta. Casi 800 trabajadores sexuales y activistas de 41 países se unieron a miles de sus pares indios.
"Estoy aquí porque esto es un festival para nosotros", dijo un trabajador transexual del meridional estado indio de Andhra Pradesh. "Pero también estamos protestando por la negativa de Estados Unidos a otorgar las visas. Es como negarnos los derechos humanos".
Anna, quien representa a la organización de trabajadores sexuales canadienses Stella, dijo que la reunión en Kolkata daba un fuerte mensaje al mundo.
"Soy una trabajadora. Una trabajadora sexual es una verdadera trabajadora. Se debería despenalizar a la profesión y aceptarnos como trabajadores. Es extraño que Estados Unidos no entienda eso", afirmó, mientras marchaba portando un paraguas rojo, ahora símbolo de esa comunidad en su lucha contra la discriminación.
Visitantes de todo el mundo se asombraron de la capacidad del Durban Mahila Samanwaya Comitee (DMSC) para organizar el Festival.
Con 65.000 miembros, el DMSC es la mayor alianza mundial de trabajadores sexuales. Tiene su base en la zona roja de Sonagachi, en Kolkata, donde más de 10.000 personas trabajan en la industria del sexo.
Akhila Sivadas, directora ejecutiva del Centro para la Defensa y la Investigación, con sede en Nueva Delhi, que se asoció con la Red Global de Proyectos de Trabajo Sexual, la Red India de Trabajadores Sexuales y el DMSC para organizar la conferencia, señaló que la reunión en Kolkata era una muestra de firmeza de la comunidad.
"Trabajadores sexuales de diversas culturas y economías se han reunido", destacó.
Según Smarajit Jana, presidente del Festival y figura del movimiento de trabajadores sexuales en Kolkata, también condenó la actitud del gobierno estadounidense.
"Cuando se nos negó la visa por parte de Estados Unidos, vinimos a Kolkata. El gobierno en India no tiene ese tipo de restricciones a los trabajadores sexuales", dijo.
"A pesar de todos nuestros fracasos y tabúes sociales, India es transparente en la lucha contra el sida, y por eso redujimos la población con VIH de cinco millones a 3,5 millones", destacó Jana. "La política en India es efectiva y progresista".
"Lo que resta por hacer es claramente fortalecer la asociación en cada nivel", opinó por su parte Akhila Sivadas. "La comunidad está tomando forma para luchar contra el VIH/Sida".
"Nos concentraremos más en los derechos sociales y en la justicia económica", afirmó.
En India, "el DMSC es la vanguardia ideológica porque comenzó cuando aquí no había tolerancia. Pero los que han sido inspirados (por esa organización) también tienen que innovar en su ambiente, en cada área, en diferentes entornos", exhortó.