Los golpes de Estado verdiblancos - TicoVisión 
El período de don Fernando Cruz se caracterizó por la lucha contra la corrupción que comenzaba a configurarse como un delito estructurado, el cual alcanzaba las esferas pública y privada.
16 de noviembre de 2012 | TicoVisión | Redacción - | Opinión | San José, Costa Rica | Tribuna para el Libre Pensamiento
Los golpes de Estado verdiblancos
Por Johnny Schmidt C.
San José, 16 de noviembre de 2012.- La no reelección del magistrado Fernando Cruz Castro ha encendido la polémica nacional en lo que don Mariano Figueres ha calificado como un “golpe de Estado” al sistema judicial.
No es la primera vez que los verdiblancos dan éste tipo de golpes, lo hicieron con la reforma a la Constitución Política que le permitió a Oscar Arias volver a la silla presidencial, a lo que el ex presidente Luis Alberto Monge llamó “golpe de Estado técnico”.
Pero lo intentaron también el 1º de mayo del 2011 cuando el diputado Villanueva se auto proclamó presidente del directorio legislativo, hecho que fue calificado como “golpe de Estado” al primer poder de la República, y donde muchos dejamos todo botado para integrarnos a un movimiento en las afueras de la Asamblea Legislativa hasta que se restauró el orden y se hizo la votación legalmente que llevó al Sr, Juan Carlos Mendoza a ocupar ese cargo.
Se ha estado diciendo que la no reelección del
No es la primera vez que los verdiblancos dan éste tipo de golpes, lo hicieron con la reforma a la Constitución Política que le permitió a Oscar Arias volver a la silla presidencial, a lo que el ex presidente Luis Alberto Monge llamó “golpe de Estado técnico”.
Pero lo intentaron también el 1º de mayo del 2011 cuando el diputado Villanueva se auto proclamó presidente del directorio legislativo, hecho que fue calificado como “golpe de Estado” al primer poder de la República, y donde muchos dejamos todo botado para integrarnos a un movimiento en las afueras de la Asamblea Legislativa hasta que se restauró el orden y se hizo la votación legalmente que llevó al Sr, Juan Carlos Mendoza a ocupar ese cargo.
Se ha estado diciendo que la no reelección del
magistrado Cruz es inconstitucional por estar fuera de los tiempos establecidos en el artículo 163 de la Constitución, sin embargo muchos no sabíamos que ese artículo y el 158 habían sido reformados y que desde el año 2003 dicen :
Si al magistrado Cruz se le venció su período el 18 de octubre pasado, entonces no hay tal destiempo en su no reelección, lo que convierte el asunto en algo moral y no legal.
También, han aparecido historias sobre la actuación de don Fernando con respecto al caso del capo mexicano Rafael Caro Quintero, cuando era el Jefe del Ministerio Público hace 27 años, incluso con acusaciones que terminan diciendo que el Sr. Cruz nunca debió haber sido magistrado. No se si don Fernando cometió errores o no en ese caso, lo cierto es que la captura del personaje más buscado por la DEA en aquellos años, fue todo un suceso internacional y era un tipo de caso bastante inusual en nuestras policías y en nuestro sistema jurídico.
Ahora bien, errar es de humanos, y si don Fernando Cruz cometió faltas en aquel entonces, las ha sabido enmendar con 27 años –después de lo de Caro Quintero- de una trayectoria impecable en nuestro sistema judicial, y los últimos 8 como magistrado de la Sala Constitucional, dónde se caracterizó por su independencia de criterio para resolver.
A don Fernando se le reconoce que durante su gestión como fiscal general, la creación de la Unidad Especializada contra la Corrupción, que inició su trabajo con el caso del Fondo Nacional de Emergencias, el Hospital Iberoamericano, la contaminación con el 245T (herbicida cancerígeno utilizado por algunas compañías en nuestro país), y con algunos peculados importantes en el sector público. Su lucha se materializó en lo que hoy es la Unidad de Delitos Económicos, Corrupción y Tributarios.
El período de don Fernando Cruz se caracterizó por la lucha contra la corrupción que comenzaba a configurarse como un delito estructurado, el cual alcanzaba las esferas pública y privada, y ya como magistrado se le recuerda por su férrea oposición al TLC y más recientemente a Crucitas, ambos proyectos de especial interés para el ex presidente Oscar Arias.
La polémica se enciende porque nunca antes en el país se había dado un hecho similar, donde “la costumbre” hecha ley, hacía que los magistrados siempre eran reelectos casi de oficio siempre y cuando no hubiera algún antecedente que ameritara su despido, o que el mismo magistrado se acogiera a su retiro. En el caso de don Fernando Cruz Castro, no existen ninguno de esos dos causales y por eso la votación de los diputados ha sido mal vista por el grueso de la población y repudiada internacionalmente por la “Unión Internacional de Jueces” en lo que se ha dado a conocer como el Documento de Washington.
Y es que no puede pasar desapercibida ésta maniobra política concebida y planeada por los altos mandos del Partido Liberación Nacional, y ejecutada por los subalternos con la ayuda de diputados de otras bancadas para que pudieran lograr los 38 votos para hacerlo, porque es claro que se rompe la independencia de Poderes.
El pueblo de Costa Rica, hoy está viendo con mucho más claridad hechos muy concretos que éste grupo político ha venido implementando, pasándole por encima y burlando todos los poderes de la República, incluso al Ejecutivo, y ponen en seria inestabilidad la institucionalidad y la credibilidad de todo el sistema.
Artículo 158.—Los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia serán elegidos por un período de ocho años y por los votos de dos terceras partes de la totalidad de los miembros de la Asamblea Legislativa. En el desempeño de sus funciones, deberán actuar con eficiencia y se considerarán reelegidos para períodos iguales, salvo que en votación no menor de dos terceras partes de la totalidad de los miembros de la Asamblea Legislativa se acuerde lo contrario. Las vacantes serán llenadas para períodos completos de ocho años.
Artículo 163.—La elección y reposición de los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, se harán dentro de los treinta días naturales posteriores al vencimiento del período respectivo o de la fecha en que se comunique que ha ocurrido una vacante.
Artículo 163.—La elección y reposición de los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia, se harán dentro de los treinta días naturales posteriores al vencimiento del período respectivo o de la fecha en que se comunique que ha ocurrido una vacante.
Si al magistrado Cruz se le venció su período el 18 de octubre pasado, entonces no hay tal destiempo en su no reelección, lo que convierte el asunto en algo moral y no legal.
También, han aparecido historias sobre la actuación de don Fernando con respecto al caso del capo mexicano Rafael Caro Quintero, cuando era el Jefe del Ministerio Público hace 27 años, incluso con acusaciones que terminan diciendo que el Sr. Cruz nunca debió haber sido magistrado. No se si don Fernando cometió errores o no en ese caso, lo cierto es que la captura del personaje más buscado por la DEA en aquellos años, fue todo un suceso internacional y era un tipo de caso bastante inusual en nuestras policías y en nuestro sistema jurídico.
Ahora bien, errar es de humanos, y si don Fernando Cruz cometió faltas en aquel entonces, las ha sabido enmendar con 27 años –después de lo de Caro Quintero- de una trayectoria impecable en nuestro sistema judicial, y los últimos 8 como magistrado de la Sala Constitucional, dónde se caracterizó por su independencia de criterio para resolver.
A don Fernando se le reconoce que durante su gestión como fiscal general, la creación de la Unidad Especializada contra la Corrupción, que inició su trabajo con el caso del Fondo Nacional de Emergencias, el Hospital Iberoamericano, la contaminación con el 245T (herbicida cancerígeno utilizado por algunas compañías en nuestro país), y con algunos peculados importantes en el sector público. Su lucha se materializó en lo que hoy es la Unidad de Delitos Económicos, Corrupción y Tributarios.
El período de don Fernando Cruz se caracterizó por la lucha contra la corrupción que comenzaba a configurarse como un delito estructurado, el cual alcanzaba las esferas pública y privada, y ya como magistrado se le recuerda por su férrea oposición al TLC y más recientemente a Crucitas, ambos proyectos de especial interés para el ex presidente Oscar Arias.
La polémica se enciende porque nunca antes en el país se había dado un hecho similar, donde “la costumbre” hecha ley, hacía que los magistrados siempre eran reelectos casi de oficio siempre y cuando no hubiera algún antecedente que ameritara su despido, o que el mismo magistrado se acogiera a su retiro. En el caso de don Fernando Cruz Castro, no existen ninguno de esos dos causales y por eso la votación de los diputados ha sido mal vista por el grueso de la población y repudiada internacionalmente por la “Unión Internacional de Jueces” en lo que se ha dado a conocer como el Documento de Washington.
Y es que no puede pasar desapercibida ésta maniobra política concebida y planeada por los altos mandos del Partido Liberación Nacional, y ejecutada por los subalternos con la ayuda de diputados de otras bancadas para que pudieran lograr los 38 votos para hacerlo, porque es claro que se rompe la independencia de Poderes.
El pueblo de Costa Rica, hoy está viendo con mucho más claridad hechos muy concretos que éste grupo político ha venido implementando, pasándole por encima y burlando todos los poderes de la República, incluso al Ejecutivo, y ponen en seria inestabilidad la institucionalidad y la credibilidad de todo el sistema.
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