¿Hasta cuándo los subterfugios?: Nicaragua - TicoVisión |
Escrito en 16/03/13 a 13:02:50 GMT-06:00 Por Administrador |
La deserción más incomprensible es la del padre Carballo, víctima escandalosa del poder sandinista de los años ochenta. ¿Quién puede olvidar aquella escena dramática que vimos miles de... 16 de marzo de 2013 | TicoVisión | Redacción - | Opinión | San José, Costa Rica | Tribuna para el Libre Pensamiento Por Jorge J. Cuadra V. 16 de marzo de 2013.- Mientras se sigan usando escapatorias, excusas en las denuncias de conocidos personajes, ocultando sus nombres aunque una gran cantidad de escuchas o lectores sepan de quien se trata, las fallas o delitos cometidos por quienes no se mencionan por nombres y apellidos seguirán creciendo o se seguirán cometiendo con cierta impunidad. La Iglesia les prohíbe a sus sacerdotes hacer política partidaria. Hoy por la mañana en uno de los programas de contenido político que se pasan por la televisión, el invitado era un sacerdote que se estaba refiriendo a lo dañino que puede llegar a ser la doctrina de doña Rosario, Vivir Bonito, que la ha concebido para controlar el reducto sagrado del hogar. Decía ese sacerdote que el gobierno del Presidente Ortega se estaba preparando para invadir la privacidad de los hogares nicaragüenses, con el fin de perpetuarse por años en el poder con el soporte de una juventud programada y descerebrada. Entonces surgió la pregunta de qué hacer con los sacerdotes que responden a los llamados de este gobierno y a los mandatos del Cardenal Obando, en lugar de la del Arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes. Entonces podríamos aprovechar para preguntar por las actuaciones de los acólitos del Cardenal, a los que describen como el monseñor gordito, el cura desnudo y el de las misas de sanación, que ahora son arlequines presidenciales, pero nunca mencionan sus nombres. La mayor deserción y decepción que se ha producido dentro de las filas del catolicismo, es la del Cardenal Obando y Bravo, que de héroe pasó a villano por razones oscuras que solo Dios y él conocen. Pero es notorio que está al servicio de la maldad, al estar al servicio de un gobierno corrupto, inconstitucional y absolutista. La deserción más incomprensible es la del padre Carballo, víctima escandalosa del poder sandinista de los años ochenta. ¿Quién puede olvidar aquella escena dramática que vimos miles de televidentes cuando el padre Carballo salió desnudo de una casa ante las cámaras de la televisión oficialista. No contentos con la humillación de mostrar su intimidad al desnudo, publicaron que lo habían agarrado en flagrante fornicación. Ese sacerdote que tiene todas las razones para alejarse de sus victimarios, lo vemos hoy ensalzando a sus verdugos patéticamente sumisa y servilmente. Del monseñor glotón ni se habla, porque es pájaro de alto vuelo y vieja data. Su impunidad se esconde en las faldas episcopales de su jefe y protector. A Eddy Montenegro, que así es como se llama el monseñor de marras, se le recuerda por su defensa descarada a favor del favorito del Cardenal, Roberto José, cuando le regalaron la mansión Lalinde junto con las 19 manzanas de terreno que la rodean, situada en la Carretera Managua- Masaya. Esa propiedad había sido donada a la Iglesia por la señora viuda del señor Lalinde, para uso de la sagrada Institución, pero al mejor estilo de los Borgia, se la regalaron al Presidente del CSE y Monseñor Eddy, como le dicen, les dijo a los periodistas que, “Las donaciones no tienen condiciones,” y así se selló un robo descarado del Don de la Iglesia nicaragüense. Naguib Eslaquit es el caso más doloroso para las miles de personas que lo apreciamos. El enmascarado de Dios, como lo llamaba yo en las jornadas de protesta contra el régimen corrupto de los Ortega-Murillo, pero también el más comprensible, porque Eslaquit siempre anduvo en el filo de la navaja, puesto que siempre ha sido un sacerdote partidario. Lo que pasa es que no es lo mismo ser partidario de la causa de la democracia, a ser partidario de la dictadura Ortega-Murillo y bufón de la corte de la primera dama. Por eso lo vemos bailar al compás de la música de los Beatles, tan del agrado de la doña. Obando y sus tres acólitos deben ser mencionados por sus nombres como respuesta a sus actuaciones públicas y retadoras y así debería ser con toda la mafia que desangra este país para infortunio de los que no tienen trabajo, ni salud, ni educación y los mantienen en estado de miseria, por lo que agradecen la limosna de las láminas de zinc como el tesoro más preciado de sus vidas. |
Los Comentarios son responsabilidad de los que lo publican, por lo tanto no nos haremos responsables de su contenido. |