El 12 de octubre siempre merecerá un análisis controversial: Fue un acto violento – TicoVisión
La historia de 5 siglos, ha maquillado parcialmente la crueldad del encontronazo inicial, se nos ha negado mostrar la grandeza de nuestras culturas indias, y sus logros culturales, solo parcialmente se nos habla...
El 12 de octubre siempre merecerá un
análisis controversial: Fue un acto violento
Por el Dr. Guillermo Carvajal Alvarado *
13 de octubre de 2013.- Desde las narraciones iniciales se vislumbra con clara nitidez que ambos pueblos, unos los lugareños y otros los visitantes, se percatan de sus diferencias. Y este primer encuentro marcó un derrotero en la hoja de ruta de cada uno de los pueblos que se encontraron. No podríamos estudiar esta etapa de la historia indoamericana, como un pasaje ya olvidado, no fue un hecho marcador en la historia de todos los pueblos de la América Latina y por lo tanto, presente en lo somos como pueblos.
Ni somos hijos de España, ni somos hijos de las culturas indoamericanas, como lo dijera Raúl Haya de la Torre, sí somos los hijos de un acto de usurpación violento, cruel, de despojo y violación y de imposición y robo de una identidad.
La historia de 5 siglos, ha maquillado parcialmente la crueldad del encontronazo inicial, se nos ha negado mostrar la grandeza de nuestras culturas indias, y sus logros culturales, solo parcialmente se nos habla de sus desarrollos arquitectónicos y del manejo del recurso hídrico. Pero poco se nos habla de sus grandes ideas en los campos de la astronomía, de la matemática, y más aún, poco conocemos de su mundo literario.
Y todo eso se explica porque el coloniaje español fue cruento, destructivo, violento, usurpador. No reconocer esto es negar la historia. No, esto no fue un encuentro de abrazos, fue un encuentro donde se impone al otro por la fuerza con
Ni somos hijos de España, ni somos hijos de las culturas indoamericanas, como lo dijera Raúl Haya de la Torre, sí somos los hijos de un acto de usurpación violento, cruel, de despojo y violación y de imposición y robo de una identidad.
La historia de 5 siglos, ha maquillado parcialmente la crueldad del encontronazo inicial, se nos ha negado mostrar la grandeza de nuestras culturas indias, y sus logros culturales, solo parcialmente se nos habla de sus desarrollos arquitectónicos y del manejo del recurso hídrico. Pero poco se nos habla de sus grandes ideas en los campos de la astronomía, de la matemática, y más aún, poco conocemos de su mundo literario.
Y todo eso se explica porque el coloniaje español fue cruento, destructivo, violento, usurpador. No reconocer esto es negar la historia. No, esto no fue un encuentro de abrazos, fue un encuentro donde se impone al otro por la fuerza con
el fin de expropiarlo de sus bienes culturales y de su riqueza material. Han transcurrido más de 5 siglos del proceso de ocupación de las tierras de nuestros pobladores primigenios por las culturas que procedían del centro de Europa, y después de esta lejana fecha, el expediente es amplio con elementos de los defensores de la tesis civilizatoria y de sus detractores que ven este proceso como una ocupación violenta y destructora.
jos de ese encuentro. Entender esto debe ser fundamental para lograr superar esta opresión de más de 500 años.
Para Costa Rica, he hecho propuestas concretas como las de crear cantones indígenas y que ellos bajo su sistema de organización elijan sus autoridades. De igual manera que haya representación regional de los pueblos indígenas de Costa Rica en las instancias legislativas y en todas aquellas donde ellos. Consideren que debe velarse por el respeto a su cultura.
Nuestro modelo de organización social sigue siendo excluyente para muchos grupos, pero notablemente para los excluidos de siempre, los únicos y legítimos dueños de estas tierras. Nuestros indios, sí, así de claro.
* Dr. Guillermo Carvajal Alvarado: Catedrático en la Universidad de Costa Rica. Estudió Géographie et amémagement du territoire en University of Toulouse II – Le Mirail. Profesor en la Universidad de Costa Rica, en el Truman Institut Israel y en Utah State University. Alcanzó el rango de Catedrático Universitario. Ha publicado numerosos articulos y libros sobre temas sociales de América Central. Vive en San José, Costa Rica y es Gerente Propietario de Editorial y Librería Alma Mater.
La verdad, cuando se leen las crónicas de la época colonial, es notable las justificaciones usadas inicialmente por los usurpadores de estas nuevas tierras. Pero mi punto de vista es que todos hoy seguimos siendo cómplices de ese proceso destructor.
Lo somos en la medida que no hemos visualizado como un problema el que una minoría se haya apropiado de la riqueza colectiva. Sí, aún hoy el proceso continúa y para ejemplificar solo les señalaré la compra de tierras que hizo Antonio Álvarez Desanti en Panamá, quien compró una propiedad a un precio muy bajo en una zona de predominancia indígena. Ese hecho es la historia recurrente de la América Latina.
Y si eso lo hacemos aún hoy en día, podemos imaginarnos cómo fue el proceso de destructivo cuando bajo la ideología de blanquear estas sociedades se expropiaron tierras de legítima pertenencia de los pueblos amerindios. Fue un contacto de culturas violento, sangriento y opresor y nosotros somos los hi-
Lo somos en la medida que no hemos visualizado como un problema el que una minoría se haya apropiado de la riqueza colectiva. Sí, aún hoy el proceso continúa y para ejemplificar solo les señalaré la compra de tierras que hizo Antonio Álvarez Desanti en Panamá, quien compró una propiedad a un precio muy bajo en una zona de predominancia indígena. Ese hecho es la historia recurrente de la América Latina.
Y si eso lo hacemos aún hoy en día, podemos imaginarnos cómo fue el proceso de destructivo cuando bajo la ideología de blanquear estas sociedades se expropiaron tierras de legítima pertenencia de los pueblos amerindios. Fue un contacto de culturas violento, sangriento y opresor y nosotros somos los hi-
jos de ese encuentro. Entender esto debe ser fundamental para lograr superar esta opresión de más de 500 años.
Para Costa Rica, he hecho propuestas concretas como las de crear cantones indígenas y que ellos bajo su sistema de organización elijan sus autoridades. De igual manera que haya representación regional de los pueblos indígenas de Costa Rica en las instancias legislativas y en todas aquellas donde ellos. Consideren que debe velarse por el respeto a su cultura.
Nuestro modelo de organización social sigue siendo excluyente para muchos grupos, pero notablemente para los excluidos de siempre, los únicos y legítimos dueños de estas tierras. Nuestros indios, sí, así de claro.
* Dr. Guillermo Carvajal Alvarado: Catedrático en la Universidad de Costa Rica. Estudió Géographie et amémagement du territoire en University of Toulouse II – Le Mirail. Profesor en la Universidad de Costa Rica, en el Truman Institut Israel y en Utah State University. Alcanzó el rango de Catedrático Universitario. Ha publicado numerosos articulos y libros sobre temas sociales de América Central. Vive en San José, Costa Rica y es Gerente Propietario de Editorial y Librería Alma Mater.
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