¡Ha llegado la hora de Juanito Mora! - TicoVisión
Todas las sociedades, pueblos y grupos tienen un punto de convergencia y encuentro, siempre ha sucedido en momentos históricos coyunturales, la historia así lo demuestra; desde hace décadas nuestra Patria a sido vulnerada por...
Por Nelson Piedra Chinchilla *
5 de diciembre de 2014.- Todas las sociedades, pueblos y grupos tienen un punto de convergencia y encuentro, siempre ha sucedido en momentos históricos coyunturales, la historia así lo demuestra; desde hace décadas nuestra Patria a sido vulnerada por facinerosos y mercaderes de la política tradicional, paulatinamente hemos ido perdiendo nuestra identidad e idiosincrasia con el modelo neoliberal que nos han impuesto que ha sido una camisa de fuerza opresora que nos asfixia, ebrios de poder concentrado en unas pocas manos hay hecho de nuestra amada Patria su feudo privado, donde nosotros los ciudadanos no somos mas que números y simples estadísticas, la dignidad de todo un pueblo a sido desconocida.
Nunca se ha visto un cuatrienio de administración publica, más marcado de corrupción, cinismo y desigualdad social que el que dichosamente pronto terminara; hace exactamente ocho años se nos promocionaba a diestra y siniestra que el barco necesitaba un capitán, el capitán resultó ser un bucanero corsario, que entregó la soberanía de la Patria sin reparo alguno, ávido de vanidad y más fortuna, y para conseguirlo hizo miles de promesas que nunca cumplió, hace unas horas un acucioso periodista amigo mío escribía en su post “…Mi BMW, debe estar ya oxidado porque aun no me lo han entregado”.
Especialistas en tomarle el pelo al pueblo y burlarse de él, las bondades del Tratado de Libre Comercio no dan señales de vida, luego lo sucedió lo de “firme y honesta” cuya firmeza y honestidad a quedado en evidencia a lo largo de su administración, el barco naufragó y de ese naufragio solo quedan los restos, la firmeza y honestidad brillan por su ausencia, comenzando por su mecenas que con sus actos y conductas, paseando en un avión privado propiedad de oscuros personajes, se convirtió en el símbolo personificado del cinismo y la burla.
Nunca se ha visto un cuatrienio de administración publica, más marcado de corrupción, cinismo y desigualdad social que el que dichosamente pronto terminara; hace exactamente ocho años se nos promocionaba a diestra y siniestra que el barco necesitaba un capitán, el capitán resultó ser un bucanero corsario, que entregó la soberanía de la Patria sin reparo alguno, ávido de vanidad y más fortuna, y para conseguirlo hizo miles de promesas que nunca cumplió, hace unas horas un acucioso periodista amigo mío escribía en su post “…Mi BMW, debe estar ya oxidado porque aun no me lo han entregado”.
Especialistas en tomarle el pelo al pueblo y burlarse de él, las bondades del Tratado de Libre Comercio no dan señales de vida, luego lo sucedió lo de “firme y honesta” cuya firmeza y honestidad a quedado en evidencia a lo largo de su administración, el barco naufragó y de ese naufragio solo quedan los restos, la firmeza y honestidad brillan por su ausencia, comenzando por su mecenas que con sus actos y conductas, paseando en un avión privado propiedad de oscuros personajes, se convirtió en el símbolo personificado del cinismo y la burla.
Que panorama más desalentador el que se vislumbra, nuestra mandataria y su equipo de gobierno nos aplicaron a ultranza la máxima del escritor inglés George Orwell, extraída de su libro Rebelión en la Granja “algunos somos más iguales que otros” hoy como nunca se deja sentir como la brecha entre ricos y pobres se ha ensanchado más y más, hoy los pocos ricos son mucho más ricos y los pobres, que son la mayoría, son mucho más pobres; es un Estado amorfo, sin forma y dirección, donde prácticamente se ha implementado la ley de la selva donde el que es más fuerte sobrevive.
Las recetas mágicas para incrementar la producción y la economía no han generado ningún resultado positivo, las legislaciones recientes no han producido tampoco ningún resultado positivo en la parafernalia de leyes promulgadas, nuestro estado social de derecho se encuentra colapsado en un coma intenso del que es urgente y necesario despertarlo; ante ese convulso y oscuro panorama que nos amenaza con absorbernos totalmente, donde el presente es un caos y el futuro es incierto, surge la esperanza, el Pueblo Soberano despierta de su letargo y adormecimiento y se enfrenta a los paradigmas y retos del mañana; el acontecer político deja entrever que la consciencia de este pueblo esta despertando, las formulas mágicas y aladinas de los políticos tradicionales se diluyen ante la efervescencia creciente de los movimientos sociales, el descontento popular y la cruda realidad en nuestros hogares, mi corazón se inflama de esperanza y optimismo, cuando en las calles, campos, ciudades y sitios de trabajo se escucha el creciente rumor de “Ha llegado la hora de Juanito Mora”.
Este dos de febrero tenemos una cita y encuentro con la Patria, una Patria polarizada con diversas corrientes ideológicas, pero todo parece indicar que estamos ante el espectacular evento de ver surgir la Tercera República, una República, mas justa, solidaria y equitativa, que emerge desde lo profundo del corazón de un Pueblo que ya no cree en eufeminismos ni en cuentos chinos, ¡otra Costa Rica es posible!
* Nelson Piedra Chinchilla: Asesor Legal en el Bufete Chaves Castillo y Asociados
Las recetas mágicas para incrementar la producción y la economía no han generado ningún resultado positivo, las legislaciones recientes no han producido tampoco ningún resultado positivo en la parafernalia de leyes promulgadas, nuestro estado social de derecho se encuentra colapsado en un coma intenso del que es urgente y necesario despertarlo; ante ese convulso y oscuro panorama que nos amenaza con absorbernos totalmente, donde el presente es un caos y el futuro es incierto, surge la esperanza, el Pueblo Soberano despierta de su letargo y adormecimiento y se enfrenta a los paradigmas y retos del mañana; el acontecer político deja entrever que la consciencia de este pueblo esta despertando, las formulas mágicas y aladinas de los políticos tradicionales se diluyen ante la efervescencia creciente de los movimientos sociales, el descontento popular y la cruda realidad en nuestros hogares, mi corazón se inflama de esperanza y optimismo, cuando en las calles, campos, ciudades y sitios de trabajo se escucha el creciente rumor de “Ha llegado la hora de Juanito Mora”.
Este dos de febrero tenemos una cita y encuentro con la Patria, una Patria polarizada con diversas corrientes ideológicas, pero todo parece indicar que estamos ante el espectacular evento de ver surgir la Tercera República, una República, mas justa, solidaria y equitativa, que emerge desde lo profundo del corazón de un Pueblo que ya no cree en eufeminismos ni en cuentos chinos, ¡otra Costa Rica es posible!
* Nelson Piedra Chinchilla: Asesor Legal en el Bufete Chaves Castillo y Asociados
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