Las nuevas caras del nuevo gobierno - TicoVisión
¿Qué que pienso yo del nuevo gabinete? ¿Qué nos dice la composición del gobierno entrante? Recogiendo información, de diversas fuentes, porque hay muchos de los designados que no conozco, podría concluirse que la...
Por Sergio Erick Ardón Ramírez
15 de abril de 2014.- ¿Qué que pienso yo del nuevo gabinete? ¿Qué nos dice la composición del gobierno entrante? Recogiendo información, de diversas fuentes, porque hay muchos de los designados que no conozco, podría concluirse que la escogencia de Luis Guillermo, no sorprende. Hay una búsqueda de equilibrio, de mesura, reflejo del talente, y de la posición ideológica del presidente electo.
Con ese equipo de gobierno se busca llevar orden y probidad a la gestión, pero no hay asomo de propósitos de cambios sustanciales. Eso era lo esperable. Los cargos principales están en manos de gente más bien conservadora. Los resortes económicos claves los ocupan funcionarios a los que no se les conocen arrestos transformadores. En lo social sí podemos esperar mayor beligerancia e incluso iniciativas atrevidas.
En todo caso dependerá de la fuerza y la presión que ejerza la ciudadanía el que se den pasos más allá. Ahí va a estar la clave de que estos cuatro años no sean cuatro años de simplemente sostener la yegua. Ojalá que no, Luis Guillermo Solís sabe que hay grandes expectativas de cambios en la sociedad y no querrá defraudarlas. Para eso tendrá que asumir un papel muy activo en la conducción y
Con ese equipo de gobierno se busca llevar orden y probidad a la gestión, pero no hay asomo de propósitos de cambios sustanciales. Eso era lo esperable. Los cargos principales están en manos de gente más bien conservadora. Los resortes económicos claves los ocupan funcionarios a los que no se les conocen arrestos transformadores. En lo social sí podemos esperar mayor beligerancia e incluso iniciativas atrevidas.
En todo caso dependerá de la fuerza y la presión que ejerza la ciudadanía el que se den pasos más allá. Ahí va a estar la clave de que estos cuatro años no sean cuatro años de simplemente sostener la yegua. Ojalá que no, Luis Guillermo Solís sabe que hay grandes expectativas de cambios en la sociedad y no querrá defraudarlas. Para eso tendrá que asumir un papel muy activo en la conducción y
orientación del equipo de tecnócratas de que se ha rodeado en el campo clave de la economía.
Capitulo aparte merece el nombramiento de Celso Gamboa en el Ministerio de Seguridad, lo que ha provocado toda clase de especulaciones. Hay criterios encontrados, desde quienes lo defienden como una persona incluso progresista, hasta quienes lo ven como una seña fatal y consecuencia de presiones de fuera.
Ha venido siendo usual, se dice, que los últimos gobiernos costarricenses comuniquen e incluso pidan el aval de la embajada norteamericana, cuando de nombrar un ministro de seguridad se trata. Seguros estamos que este no es el caso. Solís no es un agachado más. De todas formas, veremos, como veremos, lo que este conjunto de funcionarios, incuestionablemente con vidas y hojas de servicio limpias, son capaces de hacer. Ese es el gran desafío que tiene su conductor.
Capitulo aparte merece el nombramiento de Celso Gamboa en el Ministerio de Seguridad, lo que ha provocado toda clase de especulaciones. Hay criterios encontrados, desde quienes lo defienden como una persona incluso progresista, hasta quienes lo ven como una seña fatal y consecuencia de presiones de fuera.
Ha venido siendo usual, se dice, que los últimos gobiernos costarricenses comuniquen e incluso pidan el aval de la embajada norteamericana, cuando de nombrar un ministro de seguridad se trata. Seguros estamos que este no es el caso. Solís no es un agachado más. De todas formas, veremos, como veremos, lo que este conjunto de funcionarios, incuestionablemente con vidas y hojas de servicio limpias, son capaces de hacer. Ese es el gran desafío que tiene su conductor.
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