El síndrome del culantro - TicoVisión
Don Luis Guillermo no parece haber comprendido que es presidente, no por popularidad ni convicción de los votantes. Como sabemos, es gobernante por razones circunstanciales. La campaña sucia contra el FA desatada por...
Por Roberto Sánchez
Grupo Roncahuita
Al fondo plantas de Culantro (Cilantro)
San José, 6 de julio de 2014.- Don Luis Guillermo no parece haber comprendido que es presidente, no por popularidad ni convicción de los votantes. Como sabemos, es gobernante por razones circunstanciales.
La campaña sucia contra el FA desatada por el ML y el PLN, terminó -de rebote-favoreciéndolo, y no olvidemos el desprestigio de las administraciones Arias y Chinchilla. Los ticos no querían al PLN pero tenían dos opciones: el PAC con un discurso moderado y el propio FA, a quien los liberacionistas y el ML se encargaron de demonizar (por dicha para los ticos lo lograron a medias).
En la segunda ronda electoral, el PAC se montó en una campaña de promesas, festejos populacheros y presuntos compromisos y hasta se plegó de alguna manera a la campaña del miedo al FA.
Llegando al poder, como sabemos, intenta negociar con los diputados evangélicos para ganar el directorio y después se echa atrás ante el peligro de perder los votos del FA.
La campaña sucia contra el FA desatada por el ML y el PLN, terminó -de rebote-favoreciéndolo, y no olvidemos el desprestigio de las administraciones Arias y Chinchilla. Los ticos no querían al PLN pero tenían dos opciones: el PAC con un discurso moderado y el propio FA, a quien los liberacionistas y el ML se encargaron de demonizar (por dicha para los ticos lo lograron a medias).
En la segunda ronda electoral, el PAC se montó en una campaña de promesas, festejos populacheros y presuntos compromisos y hasta se plegó de alguna manera a la campaña del miedo al FA.
Llegando al poder, como sabemos, intenta negociar con los diputados evangélicos para ganar el directorio y después se echa atrás ante el peligro de perder los votos del FA.
Primero dice apoyar a los educadores en huelga y después los amenaza con sanciones y despidos… y les dice que “es bueno el culantro, pero no tanto”.
Pone la bandera de la diversidad en todos los edificios públicos, pero una semana después va a Cartago y con mansedumbre propia de un beato, recibe una bendición y una regañada del retrógrado Obispo Ulloa.
De un plumazo traiciona su promesa de desaparecer al CONAVI y a la DIS, sin un claro compromiso de revelar las actividades de esa dudosa organización de espionaje, ni de la desprestigiada dependencia del MOPT.
Dice que no firmó un decreto para "conciliar" con los grandes evasores de impuestos, pero su ministro lo desmiente. Luego lo admite.
Se va a E.U. y regresa con 300 puestos de trabajo después que las compañías extranjeras anunciaron el cese de labores de más de 3.000 trabajadores; entonces dice que hay que "mirar al sur"...
Desgasta su imagen con espectaculitos públicos dignos de "El Chinamo" de Canal 7 en actos demagógicos apoyando a la Selección Nacional, que merece respeto y sinceridad.
Ahora anuncia que su promesa de bajar las tarifas eléctricas tendrá que esperar largo plazo mientras una junta (“¿de notables?”) analiza el problema, y se guarda en secreto el diagnóstico del ICE.
Despide a Cob (¿Por qué?). Despide a Sánchez en el Vaticano, pero anuncia que sigue adelante el "Concordato", idea del famoso coautor del memorando del miedo y del anterior y conservador Papa.
Malos signos de incumplimiento de compromisos con el pueblo y de una conducta plagada de indecisiones, dudas y contradicciones, manda el nuevo gobernante. Es lo que llaman en las redes sociales muy acertadamente, el "Síndrome del culantro".
Pone la bandera de la diversidad en todos los edificios públicos, pero una semana después va a Cartago y con mansedumbre propia de un beato, recibe una bendición y una regañada del retrógrado Obispo Ulloa.
De un plumazo traiciona su promesa de desaparecer al CONAVI y a la DIS, sin un claro compromiso de revelar las actividades de esa dudosa organización de espionaje, ni de la desprestigiada dependencia del MOPT.
Dice que no firmó un decreto para "conciliar" con los grandes evasores de impuestos, pero su ministro lo desmiente. Luego lo admite.
Se va a E.U. y regresa con 300 puestos de trabajo después que las compañías extranjeras anunciaron el cese de labores de más de 3.000 trabajadores; entonces dice que hay que "mirar al sur"...
Desgasta su imagen con espectaculitos públicos dignos de "El Chinamo" de Canal 7 en actos demagógicos apoyando a la Selección Nacional, que merece respeto y sinceridad.
Ahora anuncia que su promesa de bajar las tarifas eléctricas tendrá que esperar largo plazo mientras una junta (“¿de notables?”) analiza el problema, y se guarda en secreto el diagnóstico del ICE.
Despide a Cob (¿Por qué?). Despide a Sánchez en el Vaticano, pero anuncia que sigue adelante el "Concordato", idea del famoso coautor del memorando del miedo y del anterior y conservador Papa.
Malos signos de incumplimiento de compromisos con el pueblo y de una conducta plagada de indecisiones, dudas y contradicciones, manda el nuevo gobernante. Es lo que llaman en las redes sociales muy acertadamente, el "Síndrome del culantro".
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