Conflicto Palestino-Israelí: Paradojas de la historia - TicoVisión
Hoy vivimos una guerra de extermino del pueblo Palestino y eso por el poder de las colonias judías-sionistas en todo el mundo, notablemente por su influencia en los Estados Unidos. Mi posición es que al menos la...
Paradojas de la historia
Por el Dr. Guillermo Carvajal Alvarado *
Escritor
15 de julio de 2014.- El conflicto Palestino-Israelí, coloco primero a Palestina en el titular, puesto que ellos siempre han estado en esas tierras; no tiene una explicación religiosa entre el mundo del judaísmo y el mundo musulmán. No la dimensión del conflicto es un conflicto complejo, pero donde destaca la territorialidad, es una guerra por apoderarse de una zona que es estratégica para el mundo pero además, que es un puente entre Oriente y Occidente.
Por supuesto que no debemos olvidar que en estas tierras del Medio Oriente nacieron las religiones monoteístas más importantes del mundo, El Judaísmo y el Islamismo. Y quizá, el mirar el pasado y las creencias religiosas, puedan ayudar de alguna manera a entender algo del conflicto que tuvo que ver con la diáspora del pueblo judío, es decir búsqueda de la tierra prometida. Esta concepción entendía que a través de la peregrinación, los judíos encontrarían su tierra y a lo largo de la historia el pueblo judío fue migrando por todo el mundo conocido y fundaron colonias en cientos de pueblos y países donde se instalaron con nuevas lenguas y nuevas culturas fueron transformando a un pueblo marcado por el sino de la migración.
No obstante, las raíces del conflicto actual tiene que ver con una resolución de la Sociedad de Naciones que fue el antecesor de las Naciones Unidas. La Sociedad de Naciones había dado al gobierno inglés la administración de lo que se llamó el Mandato de la Palestina.
Por supuesto que no debemos olvidar que en estas tierras del Medio Oriente nacieron las religiones monoteístas más importantes del mundo, El Judaísmo y el Islamismo. Y quizá, el mirar el pasado y las creencias religiosas, puedan ayudar de alguna manera a entender algo del conflicto que tuvo que ver con la diáspora del pueblo judío, es decir búsqueda de la tierra prometida. Esta concepción entendía que a través de la peregrinación, los judíos encontrarían su tierra y a lo largo de la historia el pueblo judío fue migrando por todo el mundo conocido y fundaron colonias en cientos de pueblos y países donde se instalaron con nuevas lenguas y nuevas culturas fueron transformando a un pueblo marcado por el sino de la migración.
No obstante, las raíces del conflicto actual tiene que ver con una resolución de la Sociedad de Naciones que fue el antecesor de las Naciones Unidas. La Sociedad de Naciones había dado al gobierno inglés la administración de lo que se llamó el Mandato de la Palestina.
En virtud de la Segunda Guerra Mundial, y de las atrocidades de los campos de exterminio y campos de concentración creados por los alemanes para exterminar a muchos pueblos como los gitanos, rumanos, judíos y otros, y en virtud de la existencia del Mandato sobre la tierra de Palestina, se decidió reubicar a los inmigrantes judíos de Europa occidental en las tierras del mandato de Palestina y crear sobre un pueblo existente, un nuevo estado que se llamó “Estado de Israel”.
De manera que el Estado de Israel nace apenas en 1948, en tierras donde habitaban otros pueblos, incluidos pueblos nómadas que recorren el desierto de Judea. La reubicación de los judíos en tierras donde vivían los palestinos inicialmente no fue vista como una decisión conflictiva. Ya que en esas tierras habían quedado pequeños grupos de campesinos judíos organizados en torno a los “kibutz”. Una especie de socialismo agrario donde convivían en paz con sus hermanos los Palestinos, que para los años de la segunda mundial eran un pueblo industrioso.
* Dr. Guillermo Carvajal Alvarado: Catedrático en la Universidad de Costa Rica. Estudió Géographie et amémagement du territoire en University of Toulouse II – Le Mirail. Profesor en la Universidad de Costa Rica, en el Truman Institut Israel y en Utah State University. Alcanzó el rango de Catedrático Universitario. Ha publicado numerosos articulos y libros sobre temas sociales de América Central. Vive en San José, Costa Rica y es Gerente Propietario de Editorial y Librería Alma Mater.
De manera que el Estado de Israel nace apenas en 1948, en tierras donde habitaban otros pueblos, incluidos pueblos nómadas que recorren el desierto de Judea. La reubicación de los judíos en tierras donde vivían los palestinos inicialmente no fue vista como una decisión conflictiva. Ya que en esas tierras habían quedado pequeños grupos de campesinos judíos organizados en torno a los “kibutz”. Una especie de socialismo agrario donde convivían en paz con sus hermanos los Palestinos, que para los años de la segunda mundial eran un pueblo industrioso.
De hecho es muy curioso que dentro del judaísmo hay sectores religiosos que no reconocen al estado de Israel. He dicho claro que son pueblo hermanos, y nunca he señalado que sea un conflicto árabe-judío. Por supuesto que la prensa sensacionalista y la misma historia, en ocasiones utilizan cualquier arista del conflicto para negar que existe es una guerra sionista-israelí (no judía) de exterminio.
Indico que lo sucedido después de 1949 es una paradoja de las grandes religiones monoteístas que buscan la paz, y predican el amor al prójimo, por lo cual en el antiguo Mandato de la Palestina, donde por decreto de la Naciones Unidas, que no respetan ni lo uno ni lo otro, hoy coexisten dos países.
Inicialmente los judíos llegados en 1948, muchos fueron obreros en los telares de los palestinos, por cierto un pueblo muy industrioso, notablemente excelente en el desarrollo de las textileras de la época.
El expansionismo judío fue producto de la ideología del sionismo creada en Alemania a principios del siglo XX. Y estos temas Julián Frech Ayub los ha tratado muy claramente en TicoVisión Libre Pensamiento.
Hoy vivimos una guerra de extermino del pueblo Palestino y eso por el poder de las colonias judías-sionistas en todo el mundo, notablemente por su influencia en los Estados Unidos. Mi posición es que al menos la religiosidad y los líderes religiosos del mundo deberían aportar una postura de compromiso de manera que se pueda lograr una paz que sea buena para ambos países y para el mundo. Y eso pasa por el desarme de Israel.
Del gobierno de Costa Rica no me hago ilusiones, o son embajadores que envían a pasarla bien o son embajadores comprometidos con la causa sionista. Somos cómplices de una guerra de exterminio.
Indico que lo sucedido después de 1949 es una paradoja de las grandes religiones monoteístas que buscan la paz, y predican el amor al prójimo, por lo cual en el antiguo Mandato de la Palestina, donde por decreto de la Naciones Unidas, que no respetan ni lo uno ni lo otro, hoy coexisten dos países.
Inicialmente los judíos llegados en 1948, muchos fueron obreros en los telares de los palestinos, por cierto un pueblo muy industrioso, notablemente excelente en el desarrollo de las textileras de la época.
El expansionismo judío fue producto de la ideología del sionismo creada en Alemania a principios del siglo XX. Y estos temas Julián Frech Ayub los ha tratado muy claramente en TicoVisión Libre Pensamiento.
Hoy vivimos una guerra de extermino del pueblo Palestino y eso por el poder de las colonias judías-sionistas en todo el mundo, notablemente por su influencia en los Estados Unidos. Mi posición es que al menos la religiosidad y los líderes religiosos del mundo deberían aportar una postura de compromiso de manera que se pueda lograr una paz que sea buena para ambos países y para el mundo. Y eso pasa por el desarme de Israel.
Del gobierno de Costa Rica no me hago ilusiones, o son embajadores que envían a pasarla bien o son embajadores comprometidos con la causa sionista. Somos cómplices de una guerra de exterminio.
* Dr. Guillermo Carvajal Alvarado: Catedrático en la Universidad de Costa Rica. Estudió Géographie et amémagement du territoire en University of Toulouse II – Le Mirail. Profesor en la Universidad de Costa Rica, en el Truman Institut Israel y en Utah State University. Alcanzó el rango de Catedrático Universitario. Ha publicado numerosos articulos y libros sobre temas sociales de América Central. Vive en San José, Costa Rica y es Gerente Propietario de Editorial y Librería Alma Mater.
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