En sagrada familia como barrio aprendimos a hacer de poco mucho - TicoVisión
El barrio perdió su norte y ningún gobierno ni político ha llegado a plantear una solución viable al problema de la vivienda. Se ha invertido mucho en burocracia, muchos dineros nunca llegan a los que lo necesitan...
En sagrada familia como barrio aprendimos a hacer de poco mucho: y no renunciamos a ver nuestro barrio mejorar
Por el Dr. Guillermo Carvajal Alvarado *
En sus orígenes fue un barrio de artesanos y obreros, abundaban los emprendedores, joyeros, relojeros, zapateros, costureras, ventas de helados, carboneras, pulperías, ventas de frutas, de tortillas, ropa íntima. No necesitábamos salir del barrio, ahí lo teníamos todo.
Hombres y mujeres, niños y grandes compartíamos el trabajo comunal, se construyó el tempo católico, por cierto aún se mantiene fuerte y sólido. Construimos un estadio de fútbol, teníamos un gracias a don Guido Ovares un cine moderno, y un centro social El Dorado como no hubo ninguno en ningún barrio.
El barrio se enrumba bien, los hijos de los primeros pobladores estudiaba unos y trabajan los otros, en 1960 emerge el primer tugurio cerca del barrio "Aguantafilo" una calle estrecha contigua a la Unidad Sanitaria de Hatillo fue tomada por 80 familias que levantaron algo que no habíamos visto nunca, unos ranchos hechos de latas y materiales improvisados. No era en el barrio pero estaba ya muy cerca del barrio.
Pero ya esos grupos habían inoculada el agente del mal, el que el habitante el buen ciudadano dejará de pensar en que el tener la casa le costaría muchos años de esfuerzos y ya para los 1980 se hicieron pequeñas tomas de tierras en la rivera del María Aguilar, hoy el gran área verde del barrio el parque 25 de Julio está tomado por precaristas. Ya ahí han crecido muchas familias en medio de la
Hombres y mujeres, niños y grandes compartíamos el trabajo comunal, se construyó el tempo católico, por cierto aún se mantiene fuerte y sólido. Construimos un estadio de fútbol, teníamos un gracias a don Guido Ovares un cine moderno, y un centro social El Dorado como no hubo ninguno en ningún barrio.
El barrio se enrumba bien, los hijos de los primeros pobladores estudiaba unos y trabajan los otros, en 1960 emerge el primer tugurio cerca del barrio "Aguantafilo" una calle estrecha contigua a la Unidad Sanitaria de Hatillo fue tomada por 80 familias que levantaron algo que no habíamos visto nunca, unos ranchos hechos de latas y materiales improvisados. No era en el barrio pero estaba ya muy cerca del barrio.
Pero ya esos grupos habían inoculada el agente del mal, el que el habitante el buen ciudadano dejará de pensar en que el tener la casa le costaría muchos años de esfuerzos y ya para los 1980 se hicieron pequeñas tomas de tierras en la rivera del María Aguilar, hoy el gran área verde del barrio el parque 25 de Julio está tomado por precaristas. Ya ahí han crecido muchas familias en medio de la
pobreza extrema sin que se asome una solución. El precario se ha extendido, es territorio inadecuado para la construcción de vivienda, en estación muchos tugurios caen al rio o los deslaves arrastran a familias enteras.
Las luchas de los grupos de vivienda se enfocó en cual partido ganaba para así tener beneficios propios y olvidarse del barrio como un todo, a diferencia de los viejos dirigentes como Manuel Solera, Santos Mora, Sagot, Leónidas Alvarado, Rodrigo Vásquez y posteriormente Marco T. Chavarría, Efraín Soto, Álvaro Fallas. De la etapa de los grandes dirigentes se pasó a los grupos que no sabía de organización política pero si sabían pegar banderas y comprar los votos de los ciudadanos por la comida de un día.
El barrio perdió su norte y ningún gobierno ni político ha llegado a plantear una solución viable al problema de la vivienda. Se ha invertido mucho en burocracia, muchos dineros nunca llegan a los que lo necesitan. Los habitantes de "Gracias A Dios" siguen tan pobres como cuando fundaron el precario. En más de 30 años no ha habido una sola solución de vivienda, es frustrante para estas familias, se les condenó a vivir en medio de esas latas destarártelas, de la inseguridad y de los peligros de la estación lluviosa.
El barrio Sagrada Familia ya nunca más volvió a ser el mismo, y ya después de 1990 los vendedores de droga, mariguana, piedra y cocaína se han tomado militarmente el barrio. Las viejas familias muchas de ellas han vendido sus casas, o las alquilan el deterioro urbano es un hecho evidente.
Pero en la vida ciudadana hay momentos en que los pueblos se enardecen y luchan y aspiran por su mejoramiento y eso los hemos hecho a través de Asociación Deportiva Sagrada, lo han hecho doña Merry y su familia luchando por la capilla de velación y por el tempo, lo hacen Arroyo con sus proyecto de escuelas deportivas, lo hace Chichi Chinchilla con su Centro de amigos, hay muchas voces que se han mantenido vivas y luchando y haciendo por mejorar las condiciones de vida de un barrio que fue una escuela de la vida para muchas generacionales de ciudadanos de bien.
Hoy día una directora valiente de la escuela Carolina Dent, convoca a los estudiantes y a todo el barrio a luchar contra la violencia y el retorno a la paz, y el 19 de Abril del 2015 el T. Picado por iniciativa de los directivos de la AD. Sagrada Familia en un desafío a los dirigentes de LINAFA decidió que el fútbol es más que darle patadas a un balón y organizado uno de los dos partidos en el Teodoro Picado. Dos muestras masivas de concurrencia de ciudadanos que se volvieron a ver después de largas décadas de pérdida de su vida ciudadana.
Estas acciones merecen todo el seguimiento de la Policía Municipal y de la Guardia Civil, las cartas están tiradas: queremos recuperar el barrio para los ciudadanos decentes. No nos abandone en esta lucha ciudadana.
* Dr. Guillermo Carvajal Alvarado: Catedrático en la Universidad de Costa Rica. Estudió Géographie et amémagement du territoire en University of Toulouse II – Le Mirail. Profesor en la Universidad de Costa Rica, en el Truman Institut Israel y en Utah State University. Alcanzó el rango de Catedrático Universitario. Ha publicado numerosos articulos y libros sobre temas sociales de América Central. Vive en San José, Costa Rica y es Gerente Propietario de Editorial y Librería Alma Mater.
Las luchas de los grupos de vivienda se enfocó en cual partido ganaba para así tener beneficios propios y olvidarse del barrio como un todo, a diferencia de los viejos dirigentes como Manuel Solera, Santos Mora, Sagot, Leónidas Alvarado, Rodrigo Vásquez y posteriormente Marco T. Chavarría, Efraín Soto, Álvaro Fallas. De la etapa de los grandes dirigentes se pasó a los grupos que no sabía de organización política pero si sabían pegar banderas y comprar los votos de los ciudadanos por la comida de un día.
El barrio perdió su norte y ningún gobierno ni político ha llegado a plantear una solución viable al problema de la vivienda. Se ha invertido mucho en burocracia, muchos dineros nunca llegan a los que lo necesitan. Los habitantes de "Gracias A Dios" siguen tan pobres como cuando fundaron el precario. En más de 30 años no ha habido una sola solución de vivienda, es frustrante para estas familias, se les condenó a vivir en medio de esas latas destarártelas, de la inseguridad y de los peligros de la estación lluviosa.
El barrio Sagrada Familia ya nunca más volvió a ser el mismo, y ya después de 1990 los vendedores de droga, mariguana, piedra y cocaína se han tomado militarmente el barrio. Las viejas familias muchas de ellas han vendido sus casas, o las alquilan el deterioro urbano es un hecho evidente.
Pero en la vida ciudadana hay momentos en que los pueblos se enardecen y luchan y aspiran por su mejoramiento y eso los hemos hecho a través de Asociación Deportiva Sagrada, lo han hecho doña Merry y su familia luchando por la capilla de velación y por el tempo, lo hacen Arroyo con sus proyecto de escuelas deportivas, lo hace Chichi Chinchilla con su Centro de amigos, hay muchas voces que se han mantenido vivas y luchando y haciendo por mejorar las condiciones de vida de un barrio que fue una escuela de la vida para muchas generacionales de ciudadanos de bien.
Hoy día una directora valiente de la escuela Carolina Dent, convoca a los estudiantes y a todo el barrio a luchar contra la violencia y el retorno a la paz, y el 19 de Abril del 2015 el T. Picado por iniciativa de los directivos de la AD. Sagrada Familia en un desafío a los dirigentes de LINAFA decidió que el fútbol es más que darle patadas a un balón y organizado uno de los dos partidos en el Teodoro Picado. Dos muestras masivas de concurrencia de ciudadanos que se volvieron a ver después de largas décadas de pérdida de su vida ciudadana.
Estas acciones merecen todo el seguimiento de la Policía Municipal y de la Guardia Civil, las cartas están tiradas: queremos recuperar el barrio para los ciudadanos decentes. No nos abandone en esta lucha ciudadana.
* Dr. Guillermo Carvajal Alvarado: Catedrático en la Universidad de Costa Rica. Estudió Géographie et amémagement du territoire en University of Toulouse II – Le Mirail. Profesor en la Universidad de Costa Rica, en el Truman Institut Israel y en Utah State University. Alcanzó el rango de Catedrático Universitario. Ha publicado numerosos articulos y libros sobre temas sociales de América Central. Vive en San José, Costa Rica y es Gerente Propietario de Editorial y Librería Alma Mater.
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