Costa Rica: Voto de Censura, por la Dra. María Luisa Ávila - TicoVisión
22 de Agosto de 2010
TicoVisión
Por Dra. María Luisa Ávila
Ministra de Salud, Costa Rica
En primer término agradecer a los que me han enviado mensajes o los han colocado en mi muro y sobre todo depositado su confianza en mi trabajo como Ministra. Creo que luego de las declaraciones y explicaciones que he dado a los señores diputados y las señoras diputadas, el voto de censura no prosperará.
Sin embargo quiero explicarles a ustedes, en aras del respeto y la consideración que les debo y les tengo, por qué considero una obligación moral renunciar en caso de ser censurada. En el artículo 121, de nuestra Constitución en el inciso 24, dice que entre las potestades de la Asamblea Legislativa esta: Formular interpelaciones a los Ministros de Gobierno, y además, por dos tercios de votos presentes, censurar a los mismos funcionarios, cuando a juicio de la Asamblea fueren culpables de actos inconstitucionales o ilegales, o de errores graves que hayan causado o puedan causar perjuicio evidente a los intereses públicos.
Como ven un voto de censura no debe tomarse a la ligera por ninguna de las dos partes, diputados y ministros. Por dignidad, principios, respeto a la Constitución (la que he jurado respetar en dos ocasiones), lealtad a la Presidenta y al Gobierno, creo que ningún Ministro o Ministra censurada debe continuar en el puesto, considero que nadie debe aferrarse a un puesto que es transitorio, ese es el principio de nuestra democracia y lo voy a honrar. Que no sea vinculante el voto, que no seamos un régimen parlamentario, lo entiendo, pero ni ética y principios morales, me dictan que esta es la forma correcta de actuar. No creo merecer el voto de censura que el Diputado Don Walter Céspedes redacto y algunos diputados de diferentes partidos firmaron, por lo que espero que no se me otorgue, pero si llegará a ocurrir, me iré al Hospital Nacional de Niños (no a hacer proselitismo político como este mismo señor diputado dijo), con la frente en alto y segura de haber cumplido con mi deber.
Solo espero que los diputados y diputadas que voten a favor de la censura (estoy convencida que serán pocos) justifiquen cuales han sido esos actos inconstitucionales, ilegales o errores graves que causaron perjuicio a los intereses públicos y no sea solo su percepción o su interés político, es lo menos que deben hacer.
Muchas gracias a todos y todas por su apoyo, por la amistad de los que hemos sido amigos de vida desde antes de ser Ministra y a los amigos que aunque virtuales han sido cálidos conmigo.
Sin embargo quiero explicarles a ustedes, en aras del respeto y la consideración que les debo y les tengo, por qué considero una obligación moral renunciar en caso de ser censurada. En el artículo 121, de nuestra Constitución en el inciso 24, dice que entre las potestades de la Asamblea Legislativa esta: Formular interpelaciones a los Ministros de Gobierno, y además, por dos tercios de votos presentes, censurar a los mismos funcionarios, cuando a juicio de la Asamblea fueren culpables de actos inconstitucionales o ilegales, o de errores graves que hayan causado o puedan causar perjuicio evidente a los intereses públicos.
Como ven un voto de censura no debe tomarse a la ligera por ninguna de las dos partes, diputados y ministros. Por dignidad, principios, respeto a la Constitución (la que he jurado respetar en dos ocasiones), lealtad a la Presidenta y al Gobierno, creo que ningún Ministro o Ministra censurada debe continuar en el puesto, considero que nadie debe aferrarse a un puesto que es transitorio, ese es el principio de nuestra democracia y lo voy a honrar. Que no sea vinculante el voto, que no seamos un régimen parlamentario, lo entiendo, pero ni ética y principios morales, me dictan que esta es la forma correcta de actuar. No creo merecer el voto de censura que el Diputado Don Walter Céspedes redacto y algunos diputados de diferentes partidos firmaron, por lo que espero que no se me otorgue, pero si llegará a ocurrir, me iré al Hospital Nacional de Niños (no a hacer proselitismo político como este mismo señor diputado dijo), con la frente en alto y segura de haber cumplido con mi deber.
Solo espero que los diputados y diputadas que voten a favor de la censura (estoy convencida que serán pocos) justifiquen cuales han sido esos actos inconstitucionales, ilegales o errores graves que causaron perjuicio a los intereses públicos y no sea solo su percepción o su interés político, es lo menos que deben hacer.
Muchas gracias a todos y todas por su apoyo, por la amistad de los que hemos sido amigos de vida desde antes de ser Ministra y a los amigos que aunque virtuales han sido cálidos conmigo.
Comentarios de este artículo:
Injusta sería su renunciaSus razones están muy bien expuestas, van acorde con su personalidad y su preciso concepto de ética y transparencia, algo que a muchos otros les hace falta.
Antes de seguir, deseo aclarar dos cosas:
1- que mi opinión es muy personal y no en representación del medio
2- soy conocido no como adulador, sino todo lo contrario, como un perseguidor de la verdad y muchas veces controversial y tajante en mis apreciaciones sobre los diferentes tópicos de la vida, sin importar caerle bien a nadie cuando de defender mis principios se trata, o defender los de los demás.
Usted ha sido y es un ejemplo de “Funcionaria Pública”, y creo que mi opinión la comparten miles ó cientos de miles de costarricenses. Para nadie es un secreto su proceder, pues también tiene la hermosa cualidad de saberse comunicar con sus semejantes sin trazar la línea de distanciamiento entre su alto cargo y la bella simpleza de los ciudadanos comunes y corrientes, los cuales siempre encuentran en usted una respuesta sincera y directa.
Al igual que usted, no creo que las palabras del señor Diputado Walter Céspedes Salazar, lleguen a encontrar el echo suficiente como para emitir ese inapropiado “Voto de Censura”. Inapropiado, porque ninguno de los argumentos expuestos en la constitución para ese tipo de sanción, han sido afectados por su conducta y justa decisión de solicitar la evacuación de un edificio que a todas luces es una trampa mortal, sobre todo en un país con alto índice de sismicidad.
Por otra parte, aparentemente el señor Diputado Walter Céspedes Salazar, carece de antecedentes apropiados para sancionar a nadie (como dijo Cristo “El que esté libre de pecado, que lance la primera piedra), pues el tiene varios cuestionamientos pasados que hasta donde he escudriñado, al día de hoy no han sido aclarados de manera aceptable. Por mencionarle algunos, haré memoria de dos casos específicos:
1- Siendo diputado bajo la administración del señor Miguel Ángel Rodríguez, hubo cuestionamientos acerca de su ligamen o relación con un caso de tráfico de menores por el cual algunos norteamericanos nos llamaron: “Costa Rica: Thailand Of Central America”, -http://www.saidit.org/archives/jan01/heardthis.html-.
2- También, en Noviembre del 2008 se le menciona por haber firmado un contrato de arrendamiento de más de 500 hectáreas (tierras del IDA) y beneficiaba, no ha humildes trabajadores de la tierra, o necesitados de una parcela para su supervivencia, sino a los ingenios Taboga y El Viejo.
Véase: 5.5.3.3.La tierras del IDA, -http://cognoscibilidad.blogspot.com/2008/11/poli-s-tica-entre-la-nepocracia-la_21.html-.
Mejor ni sigo escudriñando en mi memoria. Creo que dos ejemplos es más que suficiente.
También creo que su renuncia sería una injusticia sin causa real que la genere. En cambio creo que provocaría enojo en una gran mayoría que hemos sabido apreciar su trabajo, enojo que inclusive pueda provocar una huelga pidiendo su reintegro inmediato, lamentando al mismo tiempo no encontrar una figura legal para solicitar la renuncia del señor Diputado Céspedes, pues nuestra Constitución no lo permite y más bien les deja gozar de inmunidad.
Lic. Julián Frech Ayub
j_frech@amnet.co.cr
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