Redacción.- Frente al desorden que han tenido los gobernantes en el manejo de los seguros sobre los bienes del Estado, la activación de la Comisión Nacional de Seguros parece ser la luz al final del camino.

En la actualidad se carece de información actualizada sobre  el estatus en que se encuentran los  bienes estatales y cuáles tienen una cobertura de seguro.

Durante la primera reunión de la Comisión Nacional de Seguros, desde su creación en 1996, se acordó diseñar una política para  abaratar costos y descartar  bienes del Estado que no califican para un seguro.

El Estado gasta aproximadamente 23 millones de dólares al año en seguros y estos los atiende la compañía Assa, que a su vez actúa como administradora de las otras empresas que le venden seguros al Estado panameño.

Como parte de la agenda la comisión se propone establecer un manual de procedimientos para  el pago de pólizas por parte del Estado. El Estado es un cliente importante de las compañías de seguros.

Assa, que es  el administrador de los seguros regulares del Gobierno desde hace ocho años contrata menos del 20% de los seguros del Estado. El paquete que maneja Assa en prima anualizada asciende a 5.6 millones de dólares e incluye los seguros regulares de vida (cobertura de muerte accidental ) e incendio (que cubre la pérdida de estructura por destrucción o daño material a consecuencia directa o indirecta del fuego).

La morosidad es un tema que también está calando en los seguros que mantiene el Estado con las compañías. En el caso de Assa, a la fecha el Gobierno le debe 8 millones de dólares, suma que abarca deudas de administraciones anteriores. Las autoridades afirman que son consciente de esta realidad, y señalan que tratan de cumplir con   todos los requerimientos para hacerle frente a dichos compromisos.