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Roma.- Ettore Gotti Tedeschi, presidente del Instituto de Obras Religiosas (IOR), el banco del Vaticano, dijo que "todo ha sido aclarado" excepto "un punto que aún debemos comprender", en relación con la investigación judicial por supuesta violación a normas sobre lavado de dinero.

La investigación está a cargo de la fiscalía de Roma, bajo la hipótesis de que hubo omisión de datos que las normas contra el lavado de dinero obligan a presentar.

En una entrevista al diario romano La Repubblica, Gotti Tedeschi, de 65 años, dijo que el punto aún por aclarar es "por qué un pedido de información se volvió una comunicación, cuando para nosotros todo es claro y límpido, en el sentido de que se trató de una normal operación de tesorería, IOR sobre IOR".

La Guardia de Finanza (policía tributaria) italiana secuestró unos 23 millones de euros del IOR que habían sido depositados en una cuenta del Credito Artigiano, y abrió una investigación sobre Gotti Tedeschi y el director general del banco vaticano, Paolo Cipriani.

Bajo la lupa de los investigadores terminaron varias operaciones efectuadas desde esa cuenta del Credito Artigiano a favor de otras, no identificadas, en la Banca del Fucino y JP Morgan Frankfurt.

En otra entrevista, esta vez al diario La Stampa, el presidente del IOR declaró que "probablemente el error consistió en usar un banco con el que aún no han sido definidos los procedimientos deseados por el Banco de Italia, un error que seguramente será aclarado a breve".

Fuentes judiciales informaron que los responsables de la investigación -los fiscales Nello Rossi y Stefano Rocco Fava- analizan si interrogarán a Gotti Tedeschi en los próximos días, luego de haber recogido declaraciones de los responsables de Crédito Artigiano.

Esos interrogatorios, subrayaron las fuentes, se concentraron en establecer los motivos por los que el IOR no identificó los sujetos para los que fueron efectuados los traslados de fondos, así como la naturaleza y finalidad de éstos, como exigen las leyes contra el lavado del dinero.

Por su parte, el Osservatore Romano -diario de la Santa Sede- dijo en un artículo que "la naturaleza y la finalidad de las operaciones que ahora son objeto de investigación podian haber sido aclarados sencilla y rápidamente".

La imagen del IOR está afectada por las responsabilidades del instituto durante los 70, cuando era presidido por el arzobispo Paul Marcinkus, con el caso del Banco Ambrosiano, cuyo presidente era Roberto Calvi, personaje vinculado a la logia P2 y la mafia siciliana, que en junio de 1982 fue hallado ahorcado debajo del puente de Blackfriars, en Londres.

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