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El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ofreció movilizar ayuda internacional para combatir el incendio forestal iniciado el jueves en Israel, una “terrible tragedia” que deja al menos 42 muertos, según publicó la misión israelí este viernes.

Se trata del peór incendio que tuvo alguna vez lugar en Israel y uno de los mayores desastres humanos y ecológicos del país y de la primera vez en su historia que Israel solicita la ayuda internacional para un siniestro de carácter civil.

El fuego, que comenzó el Jueves, aparentemente en tres diferentes focos, se extendió a suma velocidad a causa de la prolongada sequía y los fuertes vientos.

42 carceleros y policías que se disponían a evacuar una prisión israelí que estaba en peligro por el incendio en los montes del Carmelo, murieron cuando el autobús en el que viajaban fué alcanzado por una ola de fuego.

Al servicio forense israelí le tomó cerca de 24 horas la identificación de sus restos. Israel se dispone a declarar éste día, como duelo nacional.

Una de las heridas de suma gravedad es la jefa de la Policía de la Ciudad de Haifa.

En horas de la mañana del Viernes, unos 20 aviones y helicópteros anti-incendios enviados por Chipre, Grecia y Gran Bretaña comenzaron a sobrevolar la zona del siniestro, mientras llegagan a Israel otras fuerzas de bomberos y equipos de auxilio de Bulgaria, Jordania, Egipto, Francia, España, Rusia y hasta de Turquía, a pesar de la creciente rivalidad entre los dos países.

Por lo menos 15 mil personas fueron evacuadas de sus domicilios en varios barrios de la ciudad de Haifa, y en las localidades de Tirat Hacarmel y Beit Oren y otras.

El Primer Ministro Benyamin Netanyhau convocó éste Viernes al gabinete de seguridad en Tel Aviv y al término de la misma agradeció a la comunidad internacional por la ayuda prestada.

Mientras tanto comienzan a surgir las críticas por la mala preparación de los servicios de bomberos, resultado de años de negligencia y bajos presupuestos.

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