El Cairo.- El primer ministro egipcio, Ahmed Shafi, rechazó hoy la posibilidad de que el presidente Hosni Mubarak renuncie a su cargo como reclaman los manifestantes opositores para poner fin a la protesta en su contra, en la que ya murieron al menos 5 personas y 830 resultaron heridas.

"La dimisión es inaceptable”, dijo el primer ministro en conferencia de prensa emitida por la televisión estatal , al tiempo que se disculpó por los enfrentamientos que se están produciendo en la Plaza Tahrir de la capital egipcia.

"Fue un error fatal y cuando las investigaciones aclaren quién está detrás de este crimen y quiénes lo permitieron, prometo que serán considerados responsables y castigados por lo que hicieron", dijo el premier sobre los violentos hechos de ayer.

Asimismo y en un intento por calmar los ánimos y aplacar la situación de violencia que se viven en estos momentos en todo el país, Shafi anunció la apertura de una investigación sobre las muertes que se produjeron.

El nuevo gobierno egipcio "dialogará con todas las fuerzas opositoras", incluidos los Hermanos Musulmanes, aseguró el premier.
 
"Nadie quedará excluido de las conversaciones", precisó Shafik, quien esta misma mañana inició el diálogo con algunos partidos opositores minoritarios.

El grupo islámico Hermanos Musulmanes está prohibido en Egipto, a pesar de que tiene un gran número de seguidores.

En ese sentido dijo estar dispuesto también a ir a la plaza Tahrir, escenario principal de las protestas contra el gobierno, para debatir con los manifestantes.

El premier reveló "haber conversado por teléfono anoche con una cierta cantidad de jóvenes manifestantes de la plaza Tahrir", y se declaró "dispuesto a ir al lugar para hablar con ellos".

En otro orden, Shafik confirmó que ayer hubo "elementos armados" en la céntrica plaza y admitió un "vacío" en la seguridad.

Shafik, al hablar de "ausencia de seguridad", afirmó que esa vacío será "tomado en cuenta en la investigación en curso" sobre los hechos, en los que murieron al menos seis personas.