Según cifras de la Dirección de Tránsito, en el primer cuatrimestre del 2011 murieron 22 peatones y 23 ciclistas fallecieron a causa de accidentes de transito en el 2010, ya se registran 11 “penalistas” fallecidos en las calles en estos meses del 2011.

ACONVIVIR creó el Código Deontológico para potenciar y desarrollar una idea de combate a la violencia vial,  “porque cuando gritamos, tocamos la bocina, hacemos señas en las calles, son sin duda manifestaciones de violencia. Las cosas hay que llamarlas por su nombre.
 
El código es una forma de dignificar a la víctima y evitar que se le ponga en términos de culpabilidad y se tome partido en pro de la paz en las carreteras. Las noticias de sucesos tienen que ir más allá de la cobertura en el sitio, “qué pasó con el caso del atropelló de Cristopher Lang, el seguimiento noticioso no es un asunto de persecución, si no de justicia para no dejar que la impunidad se apoderé de la sociedad”, enfatizó Ramón Pendones.
 
Alejandro Trejos, miembro de ACONVIVIR quien sufre por el fallecimiento de su hija que muere la noche del 7 de octubre del 2007, atropellada por un conductor quien le arrebató la vida de Natalia y la de dos amigos más, todos menores de 19 años, la noticia tiene que “concientizar y hacer la diferencia entre siniestro y un caso de dolo y premeditación”, señaló.

“Hay que cambiar el tono y el mensaje de las campañas, no es “por favor cambiemos” si no decir las cosas como son porque mis pacientes no son simplemente las portadas de los periódicos y los telenoticieros si no los hijos e hijas de alguien que hace unos días eran sanos”, indicó la Dra. Fabiola Chacón de la Unidad de Trauma Hospital Nacional de Niños.
 
“La muerte de un sólo niño para nuestra sociedad tiene un precio muy alto. Vivir el caso de un padre o una madre que se sujeta a tus ropas implorando por la vida de su niño es un precio muy alto, más si se debe informar que aquel hijo o hija que antes corría, ahora ya no lo hace o ya no está”, señaló, con lágrimas en los ojos, la doctora Chacón, son traumas que van más allá de una imagen de televisión o una fotografía del periódico, porque cuando las cámaras se apagan es cuando las víctimas comienzan a reflejar su dolor.
 
César Quirós, Director de la Policía de Tránsito, afirmó que evidentemente la guerra en las carreteras se está perdiendo, existe poca sensibilización, cuando sucede un accidente, los conductores en vez de solidarizarse con las víctimas, se molestan con las autoridades que atiende el accidente por estar en una presa.

El Director de la Policía de Tránsito estima que las personas no se preocupan por la prevención de los accidentes en carretera porque en la cultura costarricense se piensa que nunca le sucederá, pero siempre hay algún caso en la familia, “el destino es una ironía, el pasado Jueves Santo, en la comunidad de Las Frescas en Jicaral de Lepanto, Puntarenas, sucedió un accidente mortal cuando la dueña de un bar irrespetando la ley, vendió licor a un conductor” quien partió en estado de ebriedad camino a San Ramón, éste se salió de la carretera y asesinó a una madre con su hija que resultó ser la hermana de la dueña del bar quien horas antes le había vendido licor al conductor, comentó Quirós.