Ha sido profesor de la Escuela de Ciencias de la Comunicación Colectiva de la Universidad de Costa Rica (ECCC-UCR) por 15 años en el curso Estrategia de medios, Planeación publicitaria e Industria y Cultura.

Es miembro del Colegio de Periodistas y miembro del Tribunal Electoral, Tesorero de la Junta Directiva del Instituto Nacional de la Publicidad (INPUB) e integrante del Comité de Ética de la Cámara Nacional de Radio.

Ha sido colaborador de publicaciones de El Financiero, Actualidad Económica, Rumbo, Pauta creativa, EKA y Adlatina.com, en donde ha escrito alrededor de 150 artículos sobre la evolución de la industria publicitaria centroamericana. Ha coordinado la preparación del Informe Anual Publicitario a lo largo de 20 años. Es colaborador con el escritor Carlos Cortés y con el artista Fabio Herrera del proyecto artístico y cultural Tíconos.

Ha integrado el crew del cinematográfico Santa Ana Guash, del VideoClip Sr. Caballero de Gandhi, y ha escrito varios guiones de cortometraje.

Participó como Jurado en el certamen de revistas convocado por Perfil con motivo de su décimo aniversario; ganó el concurso de logotipo para la celebración del Quinto centenario del descubrimiento de América, recibió de parte del Periódico El Financiero el reconocimiento al Innovadores 2004, por el proyecto Tíconos antes señalado, y cabe destacar que fue Asistente de dirección en el Festival Iberoamericano de la publicidad FIAP en 1986.

Entre otros galardones ganó en el 2003 el Concurso para crear el nuevo nombre de la empresa “Consumer Excepcional Nazca Saatchi & Saatchi: Tribu” y en 1990 fue el primer lugar del Certamen logotipo de la V Centenario del descubrimiento de América.

Dentro de sus estudios destacan “Estudio industrial de Tarifas de agencias de Relaciones Públicas, de publicidad y centrales de medios de Costa Rica, Estudio industrial de Productividad de agencias de publicidad y centrales de medios de Costa Rica, Expectativas de colocación en medios en Costa Rica, Índices de negociación de la industria publicitaria costarricense, Diagnóstico de la facturación de agencias publicitarias en televisión, Guía Publicitaria Costa Rica, ASCAP; Barómetro Publicitario de la Revista Rumbo, entre otros.
También escribe poesía, entre sus obras están “Poemas de amor y otras dolencias” y “Black or White”.

Recientemente publicó su primer libro de cuentos “Alguien singular”, una de las historias contenidas en el volumen fue publicada en La Prensa Literaria del Diario La Prensa de Nicaragua y en Áncora en La Nación de Costa Rica.

Fernando J. Leñero, ex gerente de La Nación y actualmente en Banco Cathay se mostró complacido con la entrega de este galardón, “José Francisco Correa ha dedicado toda su vida profesional a la medición e interpretación inteligente del mercado de los medios, perfeccionando e innovando sus instrumentos de medición.

Sus aportes han sido altamente influyentes para estudiar el mercado, para educar a las nuevas generaciones y para profesionalizar el trabajo de los medios y de las agencias de publicidad.
Sus reportes, conferencias, columnas y análisis han agregado gran valor a la industria y a la racionalización de las inversiones de los anunciantes”.

Dennis Aguiluz, abogado y pionero de la publicidad en Costa Rica, expresó “es un innovador, pero más que eso es un visionario. Sus dedicadas y delicadas investigaciones son una muestra de su agudeza. José Francisco Correa con todos sus equipos tecnológicos y humanos, no sería nada sin su mente que es capaz de penetrar en los números más escondidos que indican cómo están los medios de comunicación. No hay que “hacer” comunicación para merecer el premio que le entregaron, hay que conocer los medios por más de 25 años como lo ha hecho”.

“A lo largo de 25 años de ejercicio profesional he realizado investigación cuantitativa sobre la publicidad y la información divulgada por los medios en Costa Rica y Centroamérica. He tratado de reflejar la dinámica de la industria, de los competidores y de la oferta informativa de la más precisa posible”, José Francisco Correa Navas.

Edgar Mata, Vicepresidente de Comunicación Corporativa Ketchum, manifestó que en buena teoría, este reconocimiento le llega a José Francisco de manera adelantada; se supone que debió llegarle cuando tuviera nietos, quienes lo conocemos sabíamos que esto iba a suceder, solo que se suponía que iba a pasar más tarde, “sus aportes al desarrollo del mercado comunicacional en general y publicitario en particular de Costa Rica, son contundentes. La publicidad del país y de la región tiene un antes y un después de la llegada de José Francisco”.

Rolando Rodríguez Barquero, Gerente General de CAMedia coincidió con esa evolución que hizo a la industria José Francisco Correa a partir de 1985, año que podemos considerar como punto de giro. “Esta redefinición de nuestra industria se da gracias a la visión futurista y comprometida del publicista José Francisco Correa, quien junto con otros colegas, funda su empresa Servicios Publicitarios, posteriormente transformada y redefinida en Media Gurú, hoy contamos con instrumentos de control, estimación, proyección y conocimiento para las diferentes áreas de la Comunicación Colectiva, su compromiso, plasma en servicios que presta y el proceso gnoseológico de vocación que ejecuta cada semana en las aulas universitarias, aplaudimos y celebramos con exaltación el reconocimiento que el Colegio de Periodistas de Costa Rica”.

Primera Plana conversó con José Francisco Correa sobre la entrega de este galardón.

¿Qué significa el reconocimiento de la Medalla de la Comunicación en este momento de su carrera profesional?

Tiene un gran valor para mi carrera profesional. Llega en un momento de cambios o de transición y me dará el impulso necesario para dar el salto. Es un valioso estímulo para seguir adelante.

Por otra parte, me parece muy importante el mensaje que envía el COLPER a la sociedad de que todos los profesionales de la comunicación contamos.

A la gente que desconoce su trayectoria, ¿me podría resumir su carrera profesional?
 
A lo largo de 25 años de ejercicio profesional he realizado investigación cuantitativa sobre la publicidad y la información divulgada por los medios en Costa Rica y Centroamérica. He tratado de reflejar la dinámica de la industria, de los competidores y de la oferta informativa. He sido profesor en la UCR desde 1988 y siempre he querido estar cerca del cine, el arte y la literatura.

Media Gurú es una empresa regional y usted su Vicepresidente, un extranjero que ha hecho empresa en el país, ¿qué recomienda a los profesionales de la comunicación jóvenes que desean dedicarse a lo propio?
 
Que si tienen una buena idea, no se esperen hasta que la desarrolle otro y que pongan todo su empeño y creatividad en ella. Las oportunidades llegan una vez en la vida.

¿Qué servicios de la comunicación considera están aún muy poco desarrollo en el país?
 
Ahora, con el advenimiento de los medios sociales se ha abierto muchos nuevos espacios en donde incursionar. La creación de contenidos debería de ser uno de esos espacios; la implementación de comunicación, otro. En investigación aun existe mucho terreno para innovar.
 
¿Cuál estima usted es la mayor revolución del lenguaje en la era de la comunicación?

Los públicos y los medios han roto el pacto que tenían implícito desde hace muchos años: el contenido es gratis y vea los anuncios y no se mezclan contenidos y publicidad. Con el advenimiento de los medios sociales volvemos la vista a la interacción de las personas y nos damos cuenta que siempre ha sido determinante, pero que ahora es más fácil la difusión gracias a las tecnologías y, por supuesto, queremos aprovecharla.  Creo que las comunicaciones comerciales debemos ser cautelosos en su aprovechamiento, no ir más allá de los límites que nos impone la ética y la convivencia armoniosa.

Por otra parte, tengo el presentimiento que hay una ruptura de la estética, de la credibilidad, una conciencia que va creciendo en torno a los valores intrínsecos de la humanidad: solidaridad, igualdad, compartir...
 
¿Hay convivencia entre públicos: lectores de papel y digitales?

Soy un amante del papel. Por ello, creo que tengo una versión un poco distorsionada. Veremos conviviendo las dos opciones por los próximos años.

Aún más crítico, ¿hay convivencia entre los profesionales de comunicación viejos y los jóvenes?

Me acabo de sentir en el centro de estos dos grupos de amigos. Personalmente procuro el intercambio generacional y lo aprecio. A quienes llaman viejos, estuvieron cerca de eventos tan relevantes como el advenimiento de la Tele, de la transmisión satelital, del impacto que ello tuvo en el mercado de revistas y de muchos acontecimientos informativos de gran relevancia en la historia contemporánea. De ellos tenemos mucho que aprender, p ero de los jóvenes también: los nuevos lenguajes expresivos, del hablado o gestual al audiovisual. Aprendemos de esa renovada visión de las comunicaciones y del mundo que tienen.
 
¿Qué recomienda usted a las nuevas generaciones para adaptarse a las nuevas herramientas sin olvidar los principios y valores tradicionales?

Hablando de principios profesionales, yo creo que las lecciones de toda la vida del mundo real, siguen valiendo sobre el mundo virtual. Pensemos, en una: Una imagen vale más que mil palabras. Otra: Debo dirigir la comunicación a un público meta. Otra: Debo comunicar una idea. Muchos, por no decir todos, siguen vigentes, claro que dentro de nuevos espacios.

Pero si nos referimos a los principios y valores más esenciales, aquellos que nos definen como humanos, no hay vuelta de hoja, siguen vigentes. Por suerte, el COLPER está empeñado en implementar los códigos de ética de todas las profesiones que cobija y ello va a tener un importante impacto en el colectivo social de Costa Rica.
 
Al igual qué el país, ¿somos un gremio que requiere un gran consenso para definir adónde vamos?

Y qué difícil, ¡cómo cuesta que nos pongamos de acuerdo!  Si los sectores que conforma la industria no son capaces de poder fijarse metas colectivas, que puede estar pasando a nivel del país. Este es un aspecto en el que tendremos que proponernos todos cambiar. Saber que somos parte de un engranaje: Escuelas de comunicación, Colegios profesionales, Asociaciones profesionales, Medios de Comunicación, Anunciantes y hasta el propio Gobierno. El problema es que de pronto una pieza se cree más importante que otra y piensa que puede controlar el movimiento de las demás y comienzan las resistencias, las ineficacias, las confrontaciones.
 
Estima usted que es el Colegio de Periodistas profesionales en comunicación, la institución qué debería dirigir ese consenso
 
Como dije anteriormente, es parte del engranaje. Lo que puede hacer es propiciarlo, servir de estímulo, de acercamiento, es espacio de discusión y encuentro.

Cómo se logra el consenso sin que ninguna de las 4 profesionales (periodismo, relaciones públicas, publicidad y producción) se sienta excluida.
 
Siempre he creído que nuestras profesiones son interdependientes, que no puede haber periodismo sin publicidad (al menos no hasta ahora), tampoco RP, que la producción requiere de recursos económicos, al menos la mitad provienen de la publicidad, pues ahora el público está dispuesto a pagar más por los contenidos. Somos profesionales simbióticos en el ecosistema de las comunicaciones y el entretenimiento.