San José.-
El Observatorio de MIPYMES de la UNED, presenta innovador servicio de información y conocimiento sobre la micro, pequeña y mediana empresa.

Desde Internet se puede consultar y obtener más de 200 estadísticas, más de 60 indicadores y 3 índices. Es información oportuna para el diseño de proyectos, programas y políticas. No es necesario inscribirse y crear usuarios o contraseñas. El usuario puede crear sus propios cuadros y gráficos. Solo con ingresar a http://omipymes.uned.ac.cr

Durante el lanzamiento, presentó su propuesta estratégica para que Costa Rica logre convertirse en país desarrollado apoyado en la mejora de la competitividad de las MIPYMES y mostró lo que pasó con las MIPYMES durante la reciente crisis.
 
Entre el 2008 y el 2009 el parque empresarial creció en 1789 empresas formales. Las empresas grandes disminuyeron en 56, y las MIPYMES aumentaron en 1845.

Las MIPYMES forman el 98,05% del parque empresarial formal y son ágiles, flexibles y se adaptan para enfrentar una crisis o crecer.

Las MIPYMES generan la mitad del empleo privado formal y durante la crisis el empleo privado disminuyó en un 2,04%. La empresa grande disminuyó en 3,3% y la MIPYME formal en 0,6%. La microempresa es el único tipo de empresa que generó empleo durante la crisis, creció  3,8%. Si se consideran las empresas formales y semiformales, la cantidad de empresas creció en un 5,7% durante la crisis, ahora son 144520 empresas.

Con base en sus índices, plantean tres retos o prioridades estratégicas hacia el desarrollo:

1.      El índice Ecosistema de Negocios tuvo una calificación de 58,2, por lo que es prioridad mejorar el ambiente de negocios, especialmente lo relativo a trámites.

2.      El análisis de los índices aporta interesantes datos para conocer mejor a la mujer empresaria. Mientras que en talento hay equidad entre empresarios y empresarias, existe una brecha en el desempeño de la empresa que se relaciona con el género del propietario. Por lo anterior, es prioridad crear una estrategia nacional para el apoyo a la mujer empresaria quien tiene su mayor participación en el sector informal.

3.      Derivado de lo anterior, tanto por razones de productividad como de competitividad el tercer reto es fortalecer los esfuerzos en innovación. Según World Economic Forum (2010),  Costa Rica se encuentra en la segunda fase de desarrollo económico. Para alcanzar la tercera fase, en la que están la mayoría de países desarrollados debe fortalecer los factores de innovación. Esto significa aumentar la inversión en investigación, innovación y desarrollo.

Considerando la actual situación el Observatorio identifica seis ventanas de oportunidad como estrategia para mejorar la competitividad de las MIPYMES e impulsar a Costa Rica hacia el desarrollo:

1. Replantear la arquitectura de apoyo a la MIPYME con la participación de los diferentes ministerios, instituciones públicas relacionadas y los gobiernos locales, liderados por el MEIC y su Red de apoyo y Consejo Asesor PYME.  La estrategia debe pretender que la iniciativa empresarial sea competitiva y la formalización es consecuencia.

 2. Consolidar la Banca de desarrollo con un enfoque estratégico en la innovación, las empresas nacidas globales, la creación de consorcios, encadenamientos y  parques de innovación.

3. Aumentar la inversión en investigación, innovación y desarrollo por actividad: servicios, industria, agroindustria, comercio. Estratégica, de acuerdo a fortalezas nacionales para la diferenciación. Es importante revisar iniciativas como la nueva ley de ciencia y tecnología española orientada al fomento y la coordinación de la innovación. Está diseñada en pro del desarrollo sostenible y el bienestar social y da participación a los gobiernos locales.

4. Aumentar la atracción de Inversión Extrajera Directa (IED) estratégica MIPYME. Este tipo de inversión ya se promueve por parte de CINDE y es ideal para el país por su potencial diferenciado y el posible efecto multiplicador de estos modelos de negocio.

5. El enfoque para apoyar a la MIPYME no solo debe migrar de la atención por tamaño de empresa a tipo de empresa, según la actividad; sino que deben diseñarse políticas, programas y proyectos para  el apoyo integral a lo largo de la vida del emprendedor(a). La idea es promover la innovación y facilitar que pase de agregar valor a crear valor.

6. Por último, el fomento de cultura emprendedora en todos(a) es básico para el desarrollo sostenible del país. El esfuerzo debe incorporar la participación del sistema educativo, las familias, las empresas, los conocedores de cultura y la sociedad, en general. No está limitado a la creación de empresas. Al respecto, recomienda revisar la legislación colombiana orientada al fomento de la cultura emprendedora.

El Observatorio de MIPYMES, liderado por la UNED, es un esfuerzo conjunto con la Universidad de Costa Rica desde el Observatorio del Desarrollo, la Universidad Nacional y el Instituto Tecnológico de Costa Rica. Ha contado con el apoyo de CONARE, está articulado con la red de apoyo del MEIC e internacionalmente, con la red Iberoamericana de MIPYMES. Con estos aportes el Observatorio pretende contribuir a la discusión y diálogo que permita mejorar la competitividad sostenible de las MIPYMES y con esto, alcanzar el desarrollo del país.