El gobierno español, a través del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, manifestó su profunda preocupación por la renuncia de Castresana, quien durante dos años y medio realizó una aceptable labor con resultados positivos de contribución al esclarecimientos de casos complejos de impacto social en Guatemala.

En un comunicado, el gobierno español valora la dedicación y el compromiso que demostró el Comisionado en el ejercicio de sus responsabilidades y hace público su reconocimiento; condena los ataques sistemáticos de los que ha sido objeto en los últimos meses, cuyo objetivo, sin lugar a dudas ha sido deslegitimar el trabajo y logros de la comisión.

Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Canadá, Peter Kent, lamenta lo sucedió con Castresana y valoró el trabajo y liderazgo demostrado durante su misión, agrega que la Comisión juega un papel esencial en ayudar a Guatemala a resolver cuestiones de impunidad y corrupción; a pesar de un ambiente lleno de desafíos la CICIG ha logrado avances notables, agregó.

El embajador estadounidense, Stephen McFarland, comentó que aunque hay avances en la lucha contra la impunidad, aún hace falta profundizar demasiado, por lo que la comunidad internacional continuará su apoyo; expresó que los señalamientos de Castresana son preocupantes, al igual que los cambios de personal que el fiscal Reyes efectúo en esa institución.

Carmen Diez Orejas, embajadora española, dijo que la salida del funcionario internacional y las circunstancias en las que se originó, invitan a la reflexión y reacción de las y los guatemaltecos; todos los países amigos apoyan política y financieramente a Guatemala y va a continuar la ayuda, porque todos están comprometidos con la lucha contra la impunidad, puntualizó.