La Comisión Europea se acordó súbitamente de que la televisión de Hamás, Al Aqsa TV, sale al aire a través de Eutelsat, cuya sede está en Francia, y se ha dirigido por lo tanto a las autoridades francesas para que interrumpan en el más corto plazo la salida al aire de dicho canal de televisión.
Al Aqsa TV está divulgando el punto de vista de la población de la franja de Gaza sobre el ataque pirata de Israel contra la Flotilla de la Libertad, lo cual constituye para la Comisión Europea una forma de «incitación al odio».

En 2003-2006, Israel movilizó sus influencias en Europa y en Estados Unidos para impedir la difusión de la televisión del Hezbollah, Al Manar, antes de atacar el territorio libanés. En Francia, una campaña de prensa acusó entonces al canal Al Manar de «antisemitismo». Pero aquella acusación resultó ser una mentira y la investigación penal ordenada al efecto nunca logró demostrar su veracidad.

Finalmente, el Consejo de Estado francés prohibió de todas formas la salida al aire de la televisión del Hezbollah por «perturbación del orden público» [1].

Adoptada fuera de todo procedimiento jurídico, la nueva decisión de la Comisión Europea impone por vía administrativa un bloqueo mediático que favorece el mantenimiento del bloqueo israelí impuesto a la franja de Gaza.