"Miren lo que le pasó también a ese mundo desarrollado donde solo había un pensamiento único y una teoría única... ¡Cómo se desmorona! Por eso es necesario también consolidar no solo la democracia política, sino la democracia económica que es la gran constructora de igualdad", señaló la presidenta argentina.

El apoyo a la mandataria fue un respaldo también a la gestión de su esposo, Néstor Kirchner, fallecido en octubre pasado y que gobernó el país entre 2003 y 2007. Así lo reconocieron quienes votaron por ella.

"Desde el año 2003 en la Argentina hubo un proceso político iniciado por Néstor Kirchner que vino a poner fin a la entrega de los recursos naturales, a la expropiación de los recursos de nuestro pueblo, a la marginación y a la exclusión de millones y millones de argentinos", dice un ciudadano argentino.

"Hoy hace 10 años que ya no se habla más de la cuestión de los jubilados porque ya estamos conformes", opina un residente argentino. "La razón principal por la que voté a Cristina Kirchner es su política de Derechos Humanos", señala otro votante.

Estas elecciones primarias generales tenían como objetivo la designación de las fórmulas que los diferentes partidos presentarán en los comicios del próximo 23 de octubre. Pero la realidad es que las diez agrupaciones que compitieron en esta contienda presentaron una sola candidatura. Solo hubo alternativas variadas en algunos cargos de gobernador, legislativos y municipales.

Rosendo Fraga, analista político, opina que esta gestión ha tenido ante todo un sostén en la economía, un alto crecimiento económico que permitió reducir los costos sociales que eran muy altos, y que había generado la crisis de 2001-2002. "Este me parece que ha sido el gran tema que le ha permitido al Gobierno sostenerse. Segundo, hay un tema de interés político que es la división o unión de la oposición. Con este porcentaje la oposición está muy dividida, y esto marca una brecha en puntos entre la presidenta, que quedó en primer lugar, y quien le sigue muy importante", agrega el experto.

De todas maneras, los analistas coinciden también en que los dos meses y medio que restan hasta los comicios generales es mucho tiempo, y aún puede haber cambios. Pero esta elección ha servido a la manera de sondeo previo.

De aquí a octubre el principal desafío parece estar en el campo de la oposición. Estos resultados muestran que el Gobierno tiene todas las posibilidades de ganar y continuar el proceso de reformas iniciado en 2003. Queda en manos del electorado y la oposición la respuesta final.