Doña Flor, con su carisma que la caracteriza y una sonrisa imborrable en su rostro me respondió diciendo: “John, yo vengo de una familia muy humilde, nunca tuve nada, pase muchas carencias, dedique 39 años de mi vida al servicio de los más necesitados, los niños y los ancianos, y prometí siempre buscar y compartir un poco de felicidad con mi prójimo, por ese simple motivo lo hago con tanto gusto".

“Sí, es verdad que esto lleva mucho trabajo, dedicación y tiempo, los vecinos en vísperas de navidad ya están llamando y preguntando que qué hay de nuevo para este año, las filas de gente y carros por las tardes es algo increíble, la gente se detiene y conversa con nosotros, pero para mí lo más gratificante es ver a los niños y ancianos que me visitan, las expresiones en sus caras no tienen precio y eso es lo que me llena a mí y a mi familia, porque todo esto que usted ve, es un trabajo y un compromiso en grupo familiar”.
 
“Ronny mi hijo vive conmigo, él ayuda mucho con el mantenimiento, Juan Carlos viene de San José y colabora, Yerry y Karla viven en Estados Unidos y son los que me ayudan a buscar los inflables que tanto agradan a la gente, y a Olman le toca conmigo el armar todo el show. Para nosotros esto es más que una tradición, es un compromiso, es el compartir con todos los vecinos del cantón el sentimiento de la Navidad, y brindar un poco de felicidad a cada uno de ellos para que ¡realmente sientan el espíritu navideño en sus corazones y no se les olvide por qué se celebra realmente!...”
 
”Los niños disfrutan mucho de las luces, música y de los inflables, les encanta el trencito navideño, el pingüinito, el sube y baja, los colachos y el oso polar; yo realmente gozo mucho y me satisface poder darle a la gente esta alegría y satisfacción, lo material es lo de menos, Dios me ha premiado más en lo espiritual y como ser humano”, dijo Flor Cubero.

El espíritu navideño llega muy temprano a la casa de Doña Flor, realmente es admirable su labor y compromiso como buena generaleña que es. En su casa el espíritu navideño se propaga y transciende con mucha armonía, felicidad y alegría en los corazones de todas las personas que la visitan y comparten con ella y su familia un rato ameno y de mucho deleite festivo en esta navidad.  
 
Ya hace más de 2000 años que nació el redentor y salvador, con eso en cuenta hay que entender muy bien y tener en claro el significado de la NAVIDAD, además de compartir con amor y mucho respeto su significado verdadero.  Nunca hay que cambiarlo, confundirlo, disfrazarlo, simplemente hay que comprenderlo, entenderlo, compartirlo, respetarlo y llevarlo en nuestros corazones por lo que realmente representa y significa con todo respeto como lo hace doña Flor Cubero.
 
La navidad hay que celebrarla como se debe, y merecer realmente con respeto, felicidad y regocijo,  el nacimiento del Niño Jesús, lo cual es algo crucial y muy importante en nuestra humanidad. Yo, de mi parte les recomiendo pasar con sus cámaras y vídeos por este magnífico lugar, realmente el espectáculo es fantástico, es una experiencia inolvidable que se quedará grabada en su mente y la de sus hijos, ¡pasen, disfruten y celebren una navidad a lo generaleño con doña Flor Cubero!