Rubén Darío fue ¡periodista por profesión y vocación! - TicoVisión 
25 de Febrero del 2012 | TicoVisión | Redacción - | Opinión | San José, Costa Rica | Tribuna para el Libre Pensamiento
Por Héctor Darío Pastora
En ocasión de conmemorarse el Día del Periodista Nicaragüense, el 1 de Marzo, el Movimiento Mundial Dariano, se honra en saludar y reconocer el magisterio de los profesionales de la Prensa dentro y fuera de Nicaragua, en particular la que dignifica y hace honor a la ética y la justicia social.
Nada más propicio en esta memorable celebración, que destacar fragmentos del pensamiento de Rubén Darío acerca de “La Misión de la Prensa” publicado en el Diario “La Union”, que fundó y dirigió en San Salvador en 1891. Aun siendo diplomático en Europa y America, ejerció el periodismo como su fuente de vida, en especial en “La Nación” de Buenos Aires, Argentina, a partir de Azul (1888) hasta su muerte en 1916.
La Misión de la Prensa
“La pluma es arma hermosa. El escritor debe ser brillante soldado del derecho, el defensor y paladín de la justicia. Son gloriosas esas grandes luchas de la prensa que dan por resultado el triunfo de una buena causa, la victoria de una alta idea. Por eso los que rebajan pensamiento y palabra en ataques desleales e injustos: los que convierten la imprenta, difundidora de luz, en maquina exaltadora de ruines pasiones; los que hacen de ese apóstol: el periodista; un pasquinero los que en vez de ir llevando una antorcha entre el
Nada más propicio en esta memorable celebración, que destacar fragmentos del pensamiento de Rubén Darío acerca de “La Misión de la Prensa” publicado en el Diario “La Union”, que fundó y dirigió en San Salvador en 1891. Aun siendo diplomático en Europa y America, ejerció el periodismo como su fuente de vida, en especial en “La Nación” de Buenos Aires, Argentina, a partir de Azul (1888) hasta su muerte en 1916.
La Misión de la Prensa
“La pluma es arma hermosa. El escritor debe ser brillante soldado del derecho, el defensor y paladín de la justicia. Son gloriosas esas grandes luchas de la prensa que dan por resultado el triunfo de una buena causa, la victoria de una alta idea. Por eso los que rebajan pensamiento y palabra en ataques desleales e injustos: los que convierten la imprenta, difundidora de luz, en maquina exaltadora de ruines pasiones; los que hacen de ese apóstol: el periodista; un pasquinero los que en vez de ir llevando una antorcha entre el
pueblo, le corrompen, le ocultan la verdad y le incitan a la discordia; esos rebajan la noble misión del escritor; truecan el soldado en bandolero” Y en otro juicio sobre el poder de la prensa, Darío, escribe: “ Se le considera como una de las formas de soberanía del pueblo, como el cuarto poder, como el alma de la democracia, como el observador de las libertades públicas, como el yunque donde se forjan las nacionalidades sus derechos y sus conquistas”.
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