“Realmente pensamos que podremos, como siempre, contar con la ayuda y los buenos consejos por parte de Rusia”, respondió Annan. “Con mi participación y la de otros mediadores –añadió el enviado de la ONU- podremos aplicar los esfuerzos necesarios para poner fin a este conflicto difícil y sangriento, para asegurarnos que llegue la ayuda humanitaria a todos los que la necesitan, para que se establezca la paz en la región”.
Según opinan los diplomáticos rusos, el plan de Kofi Annan para Siria puede convertirse en realidad, ya que las autoridades sirias están listas para la colaboración. De eso advirtió el ministro adjunto de Asuntos Exteriores de Rusia, Guennadi Gatílov, al término de los encuentros del enviado especial de la ONU llevados a cabo en Moscú.
“El plan de Annan tiene buenas oportunidades para realizarse, si tanto las autoridades, como la oposición siria colaborarán con él”, precisó el funcionario en su cuenta de Twitter.
Annan llegó a Rusia el 24 El enviado especial de la ONU y de la Liga Árabe, Kofi Annan, llegó a Moscú para discutir con el Gobierno ruso la posible salida del conflicto sirio.
Su plan promueve una actuación pacífica, en un contexto en el que hasta la OTAN declara que no planea intervenir en los asuntos de Damasco.
Durante la visita, que oficialmente comienza hoy domingo, están previstos encuentros con el presidente Dmitri Medvédev y el ministro de Exteriores Serguéi Lavrov.
“Las reuniones con Kofi Annan se centrarán en la análisis de enfoques hacia una resolución pacífica del conflicto sirio”, informó el Ministerio ruso de Exteriores.
El asesor presidencial ruso, Serguéi Prijodko, contó que entre los temas que se abordarán están las medidas para poner fin al suministro de armas a la oposición siria desde el extranjero y convencer a la oposición que se siente a la mesa de negociaciones con las autoridades sirias.
Este miércoles el Consejo de Seguridad de la ONU ratificó el proyecto de declaración sobre el conflicto sirio que reproduce casi literalmente las sugerencias de Kofi Annan, hechas previamente a las autoridades y la oposición siria.
El documento no impone ningún ultimátum a las autoridades de Damasco, ni tampoco a la oposición, pero se insta a ambas partes a pasar urgentemente a la realización del plan de acciones que incluye poner fin de la violencia desde todos los lados; encontrar un mecanismo imparcial e independiente de monitoreo; evitar cualquier intromisión externa y no impedir el suministro del material humanitario a todos los sirios.