Lo anterior, con la finalidad de contribuir a satisfacer las necesidades energéticas de Costa Rica, presentes y futuras, con el empleo de energía limpia y renovable, manteniendo un ambiente sano y ecológicamente equilibrado, así como un sistema nacional de conservación fortalecido.
Masis informó que para implementar un proyecto de esta naturaleza es fundamental que las áreas protegidas sean socias, no solo para fiscalizar sino también para que junto con el Instituto Costarricenses de Electricidad (ICE), logren integrar un eco diseño.
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Si no se contempla al área de conservación como un socio estratégico con el desarrollo de cualquier proyecto de estos no creemos que sea posible, y un socio que lamentablemente seriamos un poco renco, porque nosotros visualizamos que para lograr este proyecto de esta naturaleza hay que transcender la legislación ambiental tradicional, es decir tenemos que empujar todavía más el sobre para lograr que este proyecto llegue a estándares, muchos más altos de que los estudios de impacto ambiental que pueda requerir”, añadió el compareciente.
Finalmente dijo que con el proyecto hay una oportunidad como país de demostrarle al mundo que “somos capaces de llevar un desarrollo eco diseñado, donde las áreas protegidas efectivamente son áreas productivas y que puedan también integrar y absorber un proyecto de esta magnitud”.