Ciudad del Vaticano. - El papa Benedicto XVI rechazó hoy la posibilidad de ordenar mujeres, al criticar el llamado a la desobediencia de un grupo de sacerdotes austríacos que generan una "situación dramática" en el seno de la Iglesia, dijo hoy durante la homilía de la misa crismal en San Pedro.

"¿Ordenar mujeres? No estamos autorizados", sostuvo el Papa al explicar que la "Iglesia de hoy" está atravesada por señales de rebelión.

En ese sentido, Benedicto XVI se refirió en especial a Austria, donde "un grupo de sacerdotes ha publicado un llamado a la desobediencia", con ejemplos "concretos" de cómo ejercerla, ignorando "decisiones definitivas del magisterio, por ejemplo, en el tema sobre la Ordenación de las Mujeres".

"Queremos creer a los autores de tal llamado", destacó asimismo el Papa, cuando dicen "estar convencidos de que se debe afrontar la lentitud de las Instituciones con medios drásticos para abrir nuevos caminos, para colocar a la Iglesia a la altura del hoy".

Pero dicha convicción no es suficiente para justificar la posición de los autores del llamado.

"¿La desobediencia es, en verdad, un camino?, preguntó el Papa. "¿Se puede percibir en esto algo de la conformación en Cristo, que es el presupuesto de una verdadera renovación, o más bien solo el impulso desesperado de hacer algo, de transformar la Iglesia según nuestros deseos y nuestras ideas?", subrayó Benedicto XVI.

El año pasado, más de 300 religiosos firmaron en Austria -sobre un total de 2.000 religiosos en ese país- un manifiesto a favor de reformas, entre ellas, la