ANEP acepta reto del Ministro de Hacienda
sobre gastos en Educación, Salud y Seguridad - Rechazamos cuestionamientos de Hacienda a los “gastos” en Educación, en Salud y en Seguridad.
- Gobierno desprecia aportes de los sectores sociales y sindicales en pro de una mejor recaudación.
San José, martes 22 de mayo de 2012. -Nos parecen desafortunadas las apreciaciones del nuevo Ministro de Hacienda, don Edgar Ayales Esna, indicando una especie de cuestionamiento a los recursos públicos que se invierten en los ámbitos de Educación, de Salud y de Seguridad; mismos que son fundamentales para el desarrollo de una verdadera democracia con inclusión, equidad y movilidad sociales.
Se trata de apreciaciones con evidente sesgo neoliberal y que manifiestan la obsesividad fiscalista que tanto daño causa a la sociedad.
Importantes sectores sociales y sindicales, específicamente esta organización, han venido formulando diversas propuestas, serios planteamientos y mostrando ideas novedosas y creativas, con relación a la necesaria y urgente transformación tributaria estructural que se ocupa en este país; aspectos éstos que conducen a una elevación de recursos frescos disponibles para fortalecer la política pública en tales y otros ámbitos.
Sin embargo, el presente Gobierno mira con desdén tales esfuerzos cívicos, bien intencionados, formulados sin cálculo electoral alguno.
La ANEP ha enviado en lo que va del año dos cartas a la Presidenta Chinchilla sobre estos temas sin que hasta la fecha la mandataria se haya dignado en brindar una respuesta seria. Se trata de oficios de la ANEP fechados el lunes 20 de febrero y el jueves (Santo) 5 de abril pasados.
Finalmente, el jerarca ministerial hacendario lanza una especie de reto al indicar que la ciudadanía debería debatir cómo se van a financiar los ámbitos de Educación, Salud y Seguridad.
En ANEP, que cuenta con el valioso aporte analítico y estudioso en estos temas efectuado por la Seccional ANEP-Hacienda, le aceptamos ese reto y estamos listos para debatir con él y su equipo al respecto, cuando quiera y donde quiera. Ojalá el señor Ayales esté hablando en serio.