La Policía ha abierto una investigación para esclarecer los hechos, aunque todo parece indicar, que se trata de un nuevo caso de "política de precio", denominación con la que los sectores más derechistas tratan de justificar sus acciones cuando el Ejecutivo o el sistema judicial adopta medidas contra ellos.
En el pasado han sido asaltadas en acciones similares mezquitas, iglesias, viviendas de activistas de izquierda y defensores de los derechos humanos, así como bases militares.
El suceso se produce después de que ayer el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, bloqueara una legislación en el Parlamento (Kneset) que podría haber salvado de ser evacuadas o demolidas cinco viviendas de colonos en el enclave judío de Ulpana.
Como medida compensatoria, posteriormente el jefe del Ejecutivo israelí anunció la autorización para construir un total de 851 nuevas edificaciones en distintos asentamientos de Cisjordania, 300 de ellas en la colonia de Bet El, aledaña a Ulpana.