sino también Internacional, porque el mensaje que reciben nuestros aliados por parte de nuestros diputados es muy negativo y deja en duda su compromiso con la lucha que libera nuestra nación contra el narcotráfico y la corrupción.

Costa Rica por sí sola NO puede liderar esta batalla, es necesario colaborar con los organismos y gobiernos Internacionales para tener acceso a tecnologías de punta en la localización de las lanchas rápidas que se pasean en nuestras aguas como Pedro por su casa, y que están destruyendo nuestros parques nacionales por ser utilizados como puente y camuflaje para esconder y transportar las drogas al corazón de de nuestra nación. Es necesario trabajar con la guardia Costera Norte Americana y las fuerzas Navales U.S.A, para aliviar, mejorar y avanzar en la guerra sin cuartel que estamos dando, este esfuerzo es crucial para el beneficio de todos los TICOS.

La irresponsabilidad y la falta de decisión de los diputados al NO aprobar el ingreso de este buque que portaba las pruebas en contra de estos delincuentes (85 Kilos de Mariguana), pone en peligro la seguridad nacional debilitando nuestro sistema judicial, y manda el mensaje equivocado a las organizaciones corruptas y delictivas que quieren hacer de Costa Rica y el resto de Centro América su patio de control, distribución y consumo de drogas. Con estas actitudes decimos vengan y hagan lo que les plazca, acciones como las de este lunes, no respaldan el bienestar Costarricense y comprometen la seguridad de nuestra nación.

Es imperativo que los diputados tengan bien claro el error cometido, y hagan lo necesario para enmendarlo y proteger los intereses del país y sus ciudadanos, como así lo estipula nuestra constitución. SI no colaboramos como debe de ser, los aliados nos dejaran desprotegidos ante la calaña y frialdad de las redes de narcotráfico mundiales, algo que NO se puede permitir, pues el precio a pagar sería muy alto y el daño a nuestra nación y sus ciudadanos seria irreparable.

Pensemos un momento, analicemos lo ocurrido y lo que transcurrió, Costa Rica no se puede dar el lujo de bajar los guantes ante la corrupción y el narcotráfico. SI hay que cambiar leyes y mejorarlas para agilizar este tipo de operaciones y castigar como se merece a los traficantes y a todo aquel que infrinja nuestras leyes, pues que hagan una sesión extraordinaria donde las leyes de Costa Rica se afirmen, se revisen, se reformen y se hagan más fuertes, y que se apliquen como lo indica nuestra justicia y sistema judicial.