Mi Compadre, Hernán Aróstegui-Real, periodista, relacionista público y miembro emérito de nuestra diáspora radicada en el histórico Nueva Orleans, me llamo para retarme a publicar mas cosas positivas sobre Nicaragua y como le conozco por casi un par de vidas y se que su intención es averiguar lo que no sale al mundo, ya que las noticias de los escándalos polí­ticos lo absorbe casi todo, me permito informarles lo que todos deberí­amos saber e imitar, en muchos casos, para que este importante rincón centroamericano, salga de la misma en que lo mantienen los polí­ticos irresponsables y corruptos. Un desarrollo al margen de la politiquerí­a criolla.

Comencemos con el MEDIO AMBIENTE:

Gracias a nuestra Embajadora Delgado Montalbán (Miriam Patricia), quien por seis años nos represento en los paí­ses escandinavos, Nicaragua cuenta con un grupo de inversionistas noruegos dedicados a la reactivación de nuestros bosques. Aparte de los noruegos, existe la Corporación Nacional de Reforestadores (CONFOR), una organización nicaragüense integradas por empresas e individuos que se dedican al establecimiento de plantaciones forestales con fines comerciales.  Entre sus miembros cultivan 14 mil hectáreas (20 mil manzanas). Aparte de estas hectáreas, están más de 6 mil hectáreas reforestadas por la Asociación de Reforestadores de Occidente, con el apoyo de semillas y asistencia técnica de una operadora forestal alemana, financiada por la Cuenta del Milenio.

Entre las empresas forestales esta Norteak, formada por inversionistas noruegos con metodologí­as desarrolladas a través de siglos de manejo forestal en los paí­ses Escandinavos, que ahora están cultivando, con modernas técnicas forestales. Con la reciente creación de una filial (Norteak Madera) con socios canadienses, también estarán en la capacidad de ofrecer los servicios necesarios para asegurar el proceso desde la compra de la tierra y las semillas, hasta la venta del íºltimo árbol al mejor precio posible.

Aunque en Centroamérica el ciclo de una plantación varia entre los 15 a 25 años, durante su primera década, una plantación puede generar ingresos, productos de los raleos de árboles de inferior calidad  y ya que Norteak esta establecida en Nicaragua, esto presenta una oportunidad a nuestros coterráneos, LA DIÁSPORA, de invertir en algo que por encima de todo, contribuye a rescatar nuestro medio ambiente y así­ heredar a nuestros nietos y biznietos, esa Nicaragua que todos soñamos, razón por la cual hice esta investigación, ya que muchos deseamos poseer un pedazo de nuestra tierra natal, pero debido a los muy conocidos problemas, se nos hace difí­cil asegurar el proceso, comenzando con la compra de la tierra.

Así­ como Norteak le presta servicios a sus coterráneos escandinavos, se que harí­an lo mismo por los nuestros, ya sean pequeños o medianos inversionistas, nos referimos a un promedio de 30 manzanas. Esta es la forma mas directa de hacer patria, ya que se afinca el significado de “lar patrioâ€�, o sea hogar.

Hay inversionistas que ya tienen fincas, otros  buscan la tierra más barata, mientras que otros quieren  perfilarse como inversionistas ambientales.  De la misma manera hay inversionistas con interés de estar muy de cerca de las operaciones o sea que desean residir el resto de sus dí­as en el campo  y que solo necesitan el respaldo técnico, mientras otros quieren liberarse de toda responsabilidad operativa y gerencial. Lo interesante que las expectativas de cada quién pueden concordar con metodologí­a de trabajo de una empresa como Norteak, en base de un contrato de administración o asesorí­a.

Nos dice, Per O. Grimstad, ex Director de la Agencia de Cooperación Noruega (NORAD) y fundador de NORTEAK, que su “intención principal es demostrar que es posible impulsar un proyecto de desarrollo económico con fines comerciales en un paí­s en ví­as de desarrollo, sin recurrir a fondos de cooperación,  tomando en cuenta aspectos ambientales y sociales, en colaboración total con la comunidad y las alcaldí­asâ€�. Lo anterior contrasta, con los miles de millones que nuestros paí­ses han recibido de ayuda externa, que solo ha servido para engrosar las cuentas bancarias de los gobernantes.

Como vivos ejemplos de lo que nuestros ciudadanos pueden hacer, Mario Alonso Icabalzeta, un reconocido economista y financiero matagalpino, adquirió 60 manzanas en las montañas de Matagalpa y las ha convertido en un bosque de árboles centenarios al lado de nuestra flora y fauna nacional, regalando oxigeno a su pueblo natal, así­ como D. Martha Graham de Arellano, quien convirtió su hacienda cafetalera de cien manzanas en las Sierritas de Managua en un bosque-refugio de nuestros animales en peligro de extinción, pero no necesita habilitar un bosque de 60 o 100 manzanas, ya que en las Sierritas de Santo Domingo, D. Stefan Platteau, decidió comprar una par de manzanas y las convirtió en Bosque, un digno ejemplo a seguir.

¡La experiencia de Per O. Grimstad, es que la mejor forma de ayudar al desarrollo económico y social de un paí­s es a través de apoyar o llevar a cabo proyectos ambientales,  sociales y productivos!

Hasta la próxima semana con EL ARCHIVO XCI.