diputados, de todos los partidos políticos, de todos los pensamientos ideológicos, de todas las corrientes pragmáticas que conformamos esta Asamblea Legislativa, amamos a Costa Rica.

El espíritu patrio se reflejó, en los ojos luminosos de mis compañeras y compañeros, cuando a una sola voz, entonamos, en el plenario parlamentario, el Himno Nacional, la Patriótica Costarricense y el Himno al 15 de Setiembre.

El espíritu, ¡uno solo! Todo por Costa Rica.

 Durante este corto período de mi paso por la presidencia de la Asamblea Legislativa, los diputados y las diputadas hemos aprobado leyes que el Poder Ejecutivo ha presentado como de su necesidad para gobernar y de urgencia nacional.

 Aprobamos legislación para procurar el equilibrio fiscal, para la reducción de la deuda interna, para la buena relación entre los municipios y los productores nacionales entre otras. Pero también, declaraciones de benemeritazgo que nos recuerdan, a nosotros y a nuestros hijos e hijas que, muchos otros grandes hombres y mujeres y las instituciones que nos legaron, han hecho posible que disfrutemos de la sociedad y nación que tenemos.

 Por encima de las diferencias ha privado el interés de la Patria.

 191 años en que Costa Rica ha madurado en democracia. Dios nos ilumine para que, siempre, los aniversarios en que celebramos la independencia patria, sean en paz y libertad.