Desde el jueves se han manejado diferentes cifras sobre cuántos extranjeros murieron y si todavía hay un pequeño grupo de extremistas en la planta que mantiene rehenes, mientras Argelia continúa con cierto hermetismo para liberar la información.
Las autoridades argelinas sostuvieron que la operación militar para recuperar la instalación había concluido, pero horas después otras fuentes señalaron que un pequeño grupo de rebeldes, que logró sobrevivir al asalto, mantenía varios rehenes en otro lugar de la planta.
El primer ministro británico, David Cameron, señaló que "debemos estar preparados para la posibilidad de recibir malas noticias", reportó la BBC, el canal de noticias de la televisión pública de Reino Unido.
Fuentes gubernamentales de Reino Unido apuntaron que estaban tratando de averiguar el destino de un máximo de 20 personas de nacionalidad británica y temen que varias de ellas hayan fallecido.

Los secuestradores anunciaron previamente que tenían en su poder a 41 personas de distintas nacionalidades, entre ellos franceses, estadunidenses, británicos, japoneses, surcoreanos, noruegos, colombianos, tailandeses, holandeses y rumanos.

Versiones de prensa recientes sostienen que como consecuencia de la operación militar murieron 30 rehenes, siete de ellos extranjeros, entre los que habría dos japoneses, dos británicos y un francés, según fuentes de seguridad argelinas.

Las autoridades japonesas citadas por la agencia de noticias Kyodo señalaron que 14 ciudadanos japoneses siguen desaparecidos. Al menos tres lograron escapar.

Horas antes, la agencia argelina de noticias APS anotó que, citando a fuentes locales, el ejército habría conseguido liberar a "600 rehenes argelinos" y cuatro extranjeros (dos escoceses, un keniano y un francés).

Funcionarios argelinos afirmaron que el grupo operaba bajo las órdenes de Mokhtar Belmokhtar, un comandante de alto rango de Al-Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) hasta finales del año pasado.