De ahí el malentendido entre los vecinos y el gobierno local, el cual está muy interesado en aclarar la situación y en buscar las soluciones más idóneas para la ciudadanía de Santo Domingo.

“La posición de la municipalidad se basa en criterio técnicos y legales pero también nos interesa escuchar a la gente para que dé los argumentos que consideran pertinentes sobre si hay algún tiempo de afectación. Aclaramos, que el que se extienda una certificación de un uso de suelo no quiere decir que se esté dando permiso para hacer la obra”, afirmó Laura Prado, alcaldesa.

Asimismo, este tipo de proyectos involucran no solo a las Municipalidades, también se deben realizar gestiones ante el Ministerio de Salud, la SETENA y el INVU. De ahí la idea del gobierno local de que haya un diálogo entre todas las partes para una mejor toma de decisiones pero velando por los intereses del cantón.

Finalmente, la municipalidad también está gestionando una consulta ante la SETENA para que se revise el expediente de este proyecto, tramitado desde el 2010 por la empresa Planta de Asfalto CONANSA ante dicha secretaría, debido a que en el municipio no existe un uso de suelo aprobado para la propiedad, según informó el Gestor Ambiental Municipal, Luis Diego Rubí.