San José, 6 de noviembre de 2013.-  Hace unos meses si hizo un escándalo político cuando se liberó de la cárcel a un hombre honesto de San Carlos, trabajador de la Dos Pinos, quién en una reacción súbita temiendo por la seguridad de su hija de 12 años, disparó contra un sujeto que merodeaba la parte trasera de su casa. Al “merodeador” de casas ajenas se le convirtió casi en héroe y se trató como asesino al padre de familia que reaccionó temeroso por su hija. Se inventaron leyendas y mentiras sobre un finquero disparando contra un joven que entró a su finca a coger jocotes. Todo con tal de atacar a quienes defendimos esa liberación.

Con el fin de reducir la sobrepoblación carcelaria, hace unos días se liberaron 370 personas, 73% de las cuales habían sido condenadas por asaltos. Algunos de ellos, a los pocos días de abandonar la cárcel, ya habían incurrido en nuevos delitos incluyendo asesinatos.

Mientras tanto el hombre de San Carlos indultado, trabaja honradamente, como es su naturaleza, para cuidar y mantener a su familia.

Hoy reitero mi convicción de que una persona que ante la sorpresa, el peligro o la ira, reacciona disparando contra un ladrón jamás debe ser condenado. Hoy, una vez más, me siento orgulloso de haber defendido, contra viento y marea, la liberación del hombre de San Carlos.