¿Qué es lo que ha provocado esta situación tan complicada? ¿Por qué se implementó el delicadísimo cambio de una plataforma de pago de salarios que involucra a miles de trabajadores estatales a tan pocos días de un cambio de gobierno? ¿Para qué correr ante un reto tan complejo, si, a como ahora resulta evidente, no se tenía la certeza o la capacidad para asegurar el correcto funcionamiento de la nueva plataforma tecnológica?

Anoche, supuestamente quedaron realizados los pagos casi en su totalidad; así le aseguraba el personal a cargo a la Ministra de Educación y así lo aseguraba ella muy confiada, hoy por la mañana en el programa de doña Amelia Rueda. Pero empezaron a llegar las quejas de salarios incompletos, inclusive a maestros que no habían sido afectados con la crisis, y poco a poco la Ministra fue dándose cuenta que la habían engañado. Pero… ¿quiénes la engañaron y por qué?; eso es lo que se debe investigar a fondo, pues no podemos obviar que el personal existente en informática es también heredado por el anterior gobierno.

Ni el señor Presidente, ni la Ministra del ramo deben o pueden darse el lujo de “pecar de inocentes” ante una situación tan grave y sugiero de manera respetuosa pero ¡vehemente!, que se contrate a una compañía “externa”, ajena al MEP y experta en informática, para que se hagan cargo del ordenamiento del famoso “Integra” y de poner al día los pagos de los salarios adeudados mientras se investiga al personal existente y se realiza la purga necesaria para sanear dicha Institución.

Por favor, no le pidan “patriotismo” a los educadores en suspender la huelga a sabiendas que, la mayoría tienen meses de atraso en el pago de sus alquileres, recibos de agua, luz, cuentas en pulperías donde ya no les quieren dar crédito para el sustento de sus familias, pensiones alimentarias por las que varios ya han caído en prisión, hipotecas que hacen que algunos estén a punto de perder sus viviendas. El “patriotismo” lo deben asumir ustedes, Señor Presidente de la República y Señora Ministra de Educación y agilizar la contratación antes sugerida y declarar la situación como “Emergencia Nacional”.

El hecho de que el señor Garnier ya haya dejado el cargo, no le exime de la responsabilidad sobre la debacle heredada, no por error, sino a sabiendas de la gravedad de su legado y también debe ser sujeto de investigación.

Sabemos que no es de ustedes la culpa, pero heredaron el problema y deben afrontarlo no solo con patriotismo, sino con conciencia poniéndose los zapatos de esos maestros y maestras que ya llegaron a punto de hambre y desesperación.