de los gobiernos que, ayer te abrazaban y mañana de metían un puñal. El ambientalista es aquel que ha llorado en noches oscuras y solitarias su impotencia.

El ambientalista es aquel al cual muchos empresarios y políticos quisieran ver muerto porque es una piedra para desarrollos de proyectos que afectan el ambiente pero que benefician intereses económicos y políticos. No se comprende que el ambientalista lo que busca es lo mejor para todos, sin importar condición social, económica, política, religiosa…pues en el tanto que la naturaleza este saludable, todos estaremos mejor, los de hoy y mañana.

El ambientalista a veces no comparte su dolor con su familia por no preocuparlos. Es muchas veces incomprendido y vilipendiado por el poder político y económico mordaz. Pero él siempre llevara la voz de los que no tienen voz: los animales, los arboles, el agua, el viento, el hombre.

Al ambientalista honrado siempre intentaran acallarlo, ya sea en forma física o mediante boicots, bloqueos y amenazas.

En el mundo de hoy, son muchos los ambientalistas que han dado su vida por defender la naturaleza. Algunos amigos nuestros murieron por ello, y nosotros le decíamos que aquí eso no pasaba. Cuan equivocado estaba. Hoy los tiempos son otros, y efectivamente en costa rica hoy se mata, se asesina ambientalistas por la defensa de la naturaleza.

Los ambientalistas, hoy están dejando la huella de sangre en la piel de la tierra. Su madre tierra los ha llorado con lágrimas de desesperación que ha generado un grito ahogado que ha silenciado las montañas, los ríos y los mares. Es el grito del ambientalismo “¡basta ya…tenemos derecho a la esperanza!”