Menu PrincipalNoticias NacionalesNot. InternacionalesColumnas
OtrosIniciar Sesión |
Compra: | 560,92 |
Venta: | 573,51 |
Consumidores del mundo uníos: obsolescencia programada - TicoVisión |
Publicado en 08/11/14 a 11:09:41 GMT-06:00 Por Administrador |
No siempre los empresarios y tecnólogos fueron como son hoy día, en el pasado los grandes inventores y los inversores se preocupaban por la durabilidad de sus productos; las marcas se hacían famosas por... obsolescencia programada Por el Dr. Guillermo Carvajal Alvarado * La economía capitalista está asentada sobre hilos muy frágiles, el famoso capítulo de la “mano invisible”, que no es más que la “mano peluda” del comerciante que nos quita a poquitos los recursos de nuestro esfuerzo laboral. Admiro a los economistas por sus recursos literarios y por su esfuerzo en tratar de poner en números su anti poesía. La “mano invisible” metáfora donde encuentra fundamento las relaciones desiguales de intercambio comercial entre la oferta y la demanda, el juego entre ambas nos lleva establecer algo que es fundamental que es el precio de los productos. Y esa vieja discusión sigue jalonado la economía y las colosales cantidades de productos y más productos. La producción, distribución y consumo son los ejes fundamentales de la economía de mercado. Y evidentemente que todos tenemos algo de productores, todos mucho de consumidores y muy poco de distribuidores. No obstante, estos tres ejes son apenas un apuntamiento muy simbólico de todas las tareas que implica el estudio de la producción como un proceso, y esa no es mi preocupación, ya hay en el país y en el mundo muchos y muy buenos economistas, solo quería reparar en que una parte fundamental de este colosal edificio que es la economía descansa en el consumo… y solo por eso podría parodiar aquella famosa expresión: “consumidores del mundo uníos”, si en realidad el ciudadano se empoderara de su rol de consumidor, e hiciera del con - sumo un acto razonado, muchos del trípode, la economía se tambalearía y podríamos reorientar los rumbos de una nueva economía centrada en las verdaderas necesidades de los seres humanos. Desde obsolescencia programada hasta comida chatarra. No siempre los empresarios y tecnólogos fueron como son hoy día, en el pasado los grandes inventores y los inversores se preocupaban por la durabilidad de sus productos; las marcas se hacían famosas por el tiempo de duración de los productos, esa era una preocupación implícita en los productos que se fabricaron hasta 1970. Luego la competencia entre marcas permitió la eliminación o absorción de muchas de ellas pasando a formar parte de “mega-marcas” bajo el predominio de las grandes empresas con gigantescos capitales y el invento final fue la fabricación de productos con un final predeterminado (vida útil y obsolescencia calculada). La duración predeterminada por ejemplo de los automóviles, los electrodomésticos, y hasta los bienes de capital como máquinas con las que se fabrican máquinas. Y el lanzamiento al mercado invenciones intermedias, es decir bienes de consumo que no han llegado al producto final que se busca, han saturado el mercado con bienes cuya obsolescencia ha sido programada. Igual que los productos industriales, los productos de nuestra de nuestra alimentación son cada vez más productos industriales; con gustos, colores y sabores artificiales, con componentes químicos que afectan el metabolismo humano. Nosotros los humanos ya vivimos esa etapa en la comida para nuestras mascotas, son tan alterados los productos que las excretas de las mascotas presentan formas y olores tolerables para que el animal pueda convivir en espacios reducidos. Por eso mucha de la responsabilidad de nosotros los consumidores es ser vigilantes de: ¿hacia adonde llevan a nuestra sociedad los productores para poder actuar de manera mancomunada y guiados por el espíritu de ser mejores consumidores? Nuevas alternativas. En muchos lugares del mundo en el campo agrícola ha habido un progreso notorio, grupos de productores y consumidores se ponen de acuerdo para comprar la producción siempre y cuando se mantenga dentro de los márgenes de una producción que no introduzca elementos tóxicos en las fases de la producción. Este tipo de alianzas será preciso fortalecerlas en un futuro para salvaguardar la salud de los ciudadanos; aún hoy día hay muchos controles que ejercer sobre los productos alimenticios que consumimos. De manera que los consumidores tenemos un rol decisor sobre los productos que queremos consumir, y un consumir preparado a asumir este reto pueda ayudar para que nuestra sociedad alcance la calidad de vida en cada producto. Como consumidores tenemos la responsabilidad de reducir paulatinamente la cantidad de los productos a consumir exigiendo una mayor calidad y reducir al mismo tiempo el derroche de materiales en el embalaje, ya que en un país pequeño como el nuestro, el tema de los rellenos sanitarios es y será un tema de la agenda ambiental y a este respecto como ciudadanos responsables, podemos evitar que muchos desechos sólidos lleguen a los vertedores de desechos sólidos. |
(2372 leidos) |
Artículos por Administrador |
Comentarios de este artículo: |
Consumidores del mundo uníos: obsolescencia programada - TicoVisión | 0 Comentarios | Publicar comentario |
Los Comentarios son responsabilidad de los que lo publican, por lo tanto no nos haremos responsables de su contenido. |
No hay comentarios por el momento. |
|