lidad. Hay los extremistas y los catastrofistas. Pero también hay que reconocer que hay gente seria y responsable que mantiene el espíritu de lucha de defensa al ambiente y la salud de los trabajadores.

Hoy los desafíos son otros, y entre ellos está el vigilar el buen manejo ambiental y sanitario de una actividad agrícola como la Piñera, donde se han presentado violaciones ambientales. No criticamos, lo hemos repetido, a una actividad en particular como la Piñera; lo que criticamos y lo continuaremos haciendo, es a los empresarios irresponsables que con tal de producir piña violan normas ambientales y sanitarias. Los buenos empresarios, los empresarios responsables social y ambientalmente, siempre tendrán nuestro apoyo y respaldo en cualquier actividad. Y “al que le caiga el guante que se lo plante”.

El camino seguirá siendo duro para los piñeros. De eso no les quepa duda. Ya la gente no traga cuento y habrá mayores controles sobre estas actividades potencialmente contaminantes. La conspiración del Desarrollo Sostenible está en marcha.

Por esto, aprovecho la ocasión para lanzarle un reto al Presidente de los piñeros. Sr. Chaves, abran todas las fincas piñeras para que se pueda realizar una auditoría y verificación ambiental y sanitaria. Si los resultados son positivos, no nos dolerán prendas para reconocerlo y apoyarlos. Procuraríamos hacerles menos duro el camino a los piñeros. Caso contrario, su organización lo reconocerá y establecerá sistemas de control y mitigación en un plazo determinado. Y si fuera del caso y la gravedad, su organización debe expulsar y condenar a los violadores y contaminadores. Hagámoslo si están tan seguros. No nos concentremos solo en los casos de Siquirres; vamos a zonas de San Carlos, Sarapiquí y la zona sur.

El sector piña, Ud. lo dice, genera grandes beneficios al país y a ustedes como piñeros. Dediquen en forma general un determinado porcentaje a lo ambiental y verán que el camino puede ser más suave y beneficioso para todos.