En la Asamblea Legislativa del 4 de mayo, se dio un dato que “sacaría del quicio” al mismo Dalai Lama. El diputado Luis Fishman dijo que Oscar Arias había gastado en propaganda durante su mandato, la suma de dieciocho mil millones de colones (¢18,000,000,000.00) con el propósito de levantarse su imagen para que la gente pensara que su Gobierno fue bueno.

Mientras los Arias gastaban todo ese dinero, el Patronato Nacional de la Infancia informó del déficit de 1,700 millones de colones en su presupuesto y la necesidad de 500 plazas para atender sus funciones en defensa de la niñez, tampoco se abonó o canceló la deuda del Gobierno con la CCSS. También, en este período presidencial cinco personas murieron ahogadas en Turrubares por la caída de un puente al que no le dieron mantenimiento por falta de recursos, cinco niños murieron en el Hospital de Limón por la falta de un equipo que costaba 40 millones de colones, 17 niños y ancianos murieron de hambre en parte de este mandato. Y así podríamos enumerar cientos de barbaridades que se pudieron evitar con los dineros que gastaron los Arias para levantarse su imagen, sin embargo, el rumbo trazado por este Gobierno no es más “pantalla” que otra cosa.

No puede ser que el ego de una persona lo ciegue al punto de ignorar tanto sufrimiento, solo  para construir una imagen que se desvanecerá tarde o temprano. Mentira que se puede cimentar la Paz sobre cadáveres de niños y ancianos. No es posible que la autoidolatría de un simple político cueste tantas vidas.

Ahora que los Arias han puesto placas en obras sin terminar, en otras que no han empezado y hasta en propiedades privadas diciendo que algún día serán obras del Estado; se les olvidó colocar sus placas en obras que sí concluyeron. Debieron haber puesto una placa en las tumbas de cada niño que murió porque no pudo ser atendido en la CCSS, los que fueron atropellados, los que murieron por agresiones y el PANI no pudo atenderlos, en las tumbas de los ancianos que también murieron de hambre, de frío y sin de atención por falta de recursos.

Debieron haber puesto sus placas en las tumbas de los muertos en el puente de Turrubares, en los otros puentes que se cayeron o están a punto de caer. Que ejerzan los Arias su derecho de colocar una placa en cada tugurio que abandonaron, pese a haber prometido una casa digna para esas familias.

Que coloquen una placa en las tumbas de cada niño que murió de hambre durante este Gobierno. Esas SÍ fueron obras realizadas por los Arias Sánchez.

¿Ese es el rumbo que los Arias le dieron al país y del que tanto hacen algarabía? ¿Eso es modernidad? Y todavía tienen el cinismo de querer volver a Gobernar.