Redacción.- La decisión de la justicia venezolana de prohibir la difusión de imágenes sobre violencia enfrentó al Gobierno con la prensa, a la que el presidente Hugo Chávez acusa de buscar provecho de un tema que inquieta al país, a un mes de las elecciones legislativas.

El viernes, el diario El Nacional publicó una fotografía a gran tamaño de una sala de la morgue de Caracas, donde se apiñaba un grupo de cadáveres, una imagen cruda que tres días después fue reproducida por el periódico Tal Cual, también crítico de Chávez.

Desde el Gobierno cuestionaron la publicación, tildándola de “pornográfica”, mientras el martes un tribunal de Caracas prohibió a todos los medios impresos la divulgación de imágenes violentas, una acción que la prensa calificó de “censura”.

En Costa Rica es una característica normal que los medios no destaquen la violencia, con lo que se cuida el turismo y la niñez.

En México, las cadenas TELEVISA y TV Azteca junto con emisoras de radio y periódicos acordaron lanzar una iniciativa para vender un mejor país al exterior y controlar las publicaciones referidas a la lucha contra el narcotráfico porque el turismo se ha caído.

En Venezuela, según la sentencia, todos los medios impresos “deben abstenerse de realizar publicaciones de imágenes violentas, sangrientas, grotescas, bien sea de sucesos o no, que de una forma u otra vulneren la integridad psíquica y moral de los niños”.

El director de El Nacional Miguel Henrique Otero, dijo que tras la medida hay un trasfondo político.