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San José.- A raíz de la entrada en vigencia del reglamento que regula la titularización de obra pública, las operadoras que administran fondos de pensión auguran un número mayor de alternativas para las inversiones de largo plazo.

El Banco Nacional tiene proyectos de esta índole que sobrepasan los $2.000 millones, al tiempo que el Banco de Costa Rica (BCR) habla de $1.600 millones en conversaciones con varias instituciones del sector estatal. Al ser de obra pública, estas emisiones, consideradas de largo plazo, se estructurarían para cinco o más años.

La ampliación en la oferta de estos instrumentos es celebrada por inversionistas institucionales como operadoras de pensiones, que necesitan vehículos de inversión con este rango de vencimiento. “Los beneficiarios serían los fondos de pensión y, por lo tanto, los futuros pensionados”, dijo José Manuel Arias, gerente de BAC San José Pensiones.

Hasta ahora hay en los portafolios de inversión de las operadoras una alta concentración en títulos del Gobierno y el Banco Central. “Este tipo de instrumentos no solo permite a las operadoras diversificar los portafolios administrados, sino que en teoría les podría ofrecer mejores rendimientos a los afiliados, ya que generalmente ofrecen un premio por encima de la curva de rendimientos soberanos”, manifestó Hermes Alvarado, gerente de BN Vital.

Sin embargo, las operadoras de un grupo financiero tendrían restricciones para invertir en instrumentos estructurados por otra subsidiaria del mismo conglomerado. “Hay limitantes para instrumentos emitidos, garantizados y estructurados por el mismo grupo de interés económico”, dijo Mario Rivera, gerente del BCR. Por ejemplo, BN Vital no podría adquirir títulos estructurados por el Banco Nacional.

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