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El reciente conflicto fronterizo entre Costa Rica y Nicaragua es un signo de un ambicioso plan por parte de Venezuela, Irán y Nicaragua para crear un "Canal de Nicaragua" que une los océanos Atlántico y Pacífico, que rivalizaría con el actual Canal de Panamá.

Costa Rica dice que la semana pasada tropas nicaragüenses entraron en su territorio a lo largo del río San Juan - la frontera entre las dos naciones. Nicaragua ha estado llevando a cabo la profundización del canal de trabajo en el río cuando ocurrió el incidente.

Fuentes de América Latina han dicho a Haaretz que el incidente en la frontera y la presión militar sobre Costa Rica, un país sin ejército, son el primer paso en un plan formulado por el presidente venezolano Hugo Chávez y el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, con financiamiento y asistencia de Irán , para crear un sustituto para el Canal de manera estratégica y de la importancia económica del de Panamá.

El plan ha despertado la preocupación en Washington, y los Estados Unidos han comenzado entre bastidores esfuerzos para frustrarlo.

Panamá es un país con una orientación claramente pro-estadounidense. Desde su construcción, que se terminó en 1914, el Canal de Panamá ha servido como un vínculo insustituible entre los océanos Atlántico y Pacífico. Más de 14,000 barcos pasan por el canal anualmente y recientemente llegó al millón el número de barcos que pasó el canal desde su apertura.

En los últimos años, la cantidad de mercancías que pasa por el canal en cada dirección fue de alrededor de 190 millones de toneladas. Las cuotas de tránsito pagadas por los barcos y otras actividades relacionadas con el canal, representan el 75 por ciento de los ingresos anuales de la economía de Panamá. La economía panameña y la estabilidad de Panamá estaría en peligro real de colapso si otro canal se lleva su monopolio sobre el transporte marítimo entre los océanos Atlántico y Pacífico.

En los últimos años, el gobierno de Ortega, un ex miembro de la guerrilla sandinista, ha tratado de hacerse con el control del río San Juan, que se encuentra en la frontera entre Nicaragua y Costa Rica. Costa Rica llevó el asunto ante el tribunal internacional de La Haya, que después de un examen cuidadoso de mapas históricos, los acuerdos anteriores y las características del terreno, determinó en julio de 2009 que el río pertenece a Nicaragua y que la frontera se encuentra en la orilla sur del río. El tribunal también dictaminó que Costa Rica tiene el derecho de libre navegación en el río.

Sin embargo, los resultados de la presente resolución no son suficientes para permitir la aplicación del plan formulado por Venezuela y Nicaragua para el objetivo de construir un nuevo canal que una los dos océanos, sino que también tendría que controlar la orilla sur del río y el punto donde el río se encuentra con el Océano Atlántico.

Hace algunas semanas, oficiales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua informaron a Costa Rica de los planes de Nicaragua para hacer el trabajo para profundizar el cauce del río San Juan, con el fin de mejorar el transporte en la hidrovía. Costa Rica no se opone a los planes, con la condición de que el trabajo no produzca daños de impacto ambiental del lado costarricense.

El proyecto de ingeniería aparente se colocó, sorprendentemente, bajo la supervisión de Edén Pastora, más conocido como "Comandante Cero", un cuestionado héroe de la resistencia sandinista anterior. Este era un indicio de que la obra tenía más de un propósito de ingeniería simple.

Hace dos semanas Pastora fue a una granja de un ciudadano de Costa Rica en el área de Isla calero y le dijo al dueño de la granja que la zona pertenecía a Nicaragua. El propietario de la granja se opuso y, posteriormente, los trabajadores agrícolas fueron golpeados y animales de granja murieron. El propietario de la finca llamó a la policía de Costa Rica, que llegó e informó a sus comandantes de que las tropas habían entrado en territorio nicaragüense en Costa Rica y levantaron una bandera de Nicaragua.

La Presidente de Costa Rica, Laura Chinchilla,  pidió la semana pasada una sesión especial de la Organización de Estados Americanos (OEA), con sede en Washington, pero, después de un día de conversaciones, no se llegó a ninguna resolución. Durante las conversaciones, Venezuela apoyó la posición de Nicaragua y mientras que Panamá se opuso y apoyó a Costa Rica.

Chinchilla anunció el miércoles que planea plantear la cuestión ante el Consejo de Seguridad de la ONU y volvió a exigir que los soldados nicaragüenses deben retirarse del territorio de Costa Rica.

Las fuentes en América Latina consideran estos acontecimientos, y el poder demostrados por Nicaragua, como un globo de ensayo por los creadores del "Plan Nuevo Canal" - Venezuela, Irán y Nicaragua. Agencias de inteligencia occidentales están siguiendo de cerca la ruta de acceso de equipos de maquinaria pesada para Nicaragua, así como las actividades de los iraníes en la capital nicaragüense, Managua.

Un funcionario del Departamento de Estado de EE.UU. dijo el miércoles en Washington al corresponsal de Haaretz, Natasha Mozgovaya, que los EE.UU. no tiene conocimiento de ningún plan para construir un nuevo canal en América Latina.

En 2007, Chávez anunció un plan para construir una carretera de 350 millones dólares que conecta los dos océanos y los iraníes han expresado su interés en la construcción de un puerto en el Océano Atlántico. Los EE.UU. no expresó preocupación acerca de cualquiera de esas iniciativas.

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