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Los que viajan, sin importar su propósito, son turistas. Esta ha sido siempre mi tesis, ya que el que se desplaza de su hogar, para una conferencia, una visita empresarial, por razones de salud o compromisos deportivos, tiene un tiempo libre que le permite buscar como conocer el destino que le ha llevado las circunstancia y eso es TURISMO.

Ayer Sábado 20, fui con mi familia a un pequeño pueblo, cerca de la ciudad de León, Nicaragua, llamado TELICA, para entrevistar a una joven que va a trabajar en nuestra casa. Por supuesto que no íbamos con los ojos cerrados y en el trayecto pudimos observar el verdor de nuestra campiña, producto de un copioso periodo de lluvia, admiramos las cosechas, ya casi lista para su recolección, el ganado, con sementales bien alimentados y  abundante cría y no se nos quedaron los volcanes llenos de fuerza telúrica, que nos brinda un paisaje acogedor. Ya con esto nos sentimos refrescados y llenos de vigor.

Pero nuestra visita, que era de una misión especifica, una vez cumplida, se convirtió en una oportunidad para hacer un poco de turismo y decidimos conocer la nueva carretera turística, construida por la generosidad de los Estados Unidos de America, através de su programa, “La Cuenta del Milenio”, que va de León a Poneloya y Las Peñitas, dos balnearios en la Costa del Pacifico de Nicaragua.

Como mi niñez la goce en León y hice ese mismo viaje muchísimas veces, unos en carreta de bueyes, otras en bellos carruajes de motor (1928-1935), cuando ya el camino era transitable y mas entrados los años en un camino pavimentado, angosto y peligroso, me causo gran satisfacción, ver ese viejo trayecto, abrirse en una esplendorosa carretera, segura y acogedora, que no solo hace de los balnearios, un barrio mas del León colonial e histórico, sino que se puede apreciar el progreso que ha llevado a los campos agrícolas y ganaderos.  Sinceramente, todos estamos en deuda con la magnanimidad de esa nación amiga - USA -.  que muchos la denigran y condenan, sin conocer que su grandeza, esta en su humanidad y su espíritu de cooperación.

La nueva carretera ofrece dos alternativas, Poneloya o Las Peñitas y lo interesante es que las dos calles principales de estos balnearios, están totalmente pavimentadas o sea que te llevan hasta su oferta hotelera y de restaurantes. Escogimos la primera entrada que es la de Las Peñitas, ya que sabíamos que allí había un buen sitio para degustar los mariscos de la zona. Almorzamos en el comedor del Hotel Suyapa, comenzando con unos camarones frescos, mejillones que crecen en los humedales de la costa, llamadas popularmente, conchas negras, seguidos por un suculento pescado (Pargo rojo) en salsa de tomates frescos, o sea que nos convertimos en turistas.

De allí, regresamos a la ciudad de León, donde hicimos algunas compras, de esas que hacen los turistas, que les gusta llevar a sus casas, algo que ven en sus viajes, lo cual da al turismo esa fuerza multiplicadora del “peso” que hace circular.

En el recorrido que hicimos por la ciudad de León, notamos mucho movimiento de personas y pensamos que estaban celebrando alguna de sus fiestas patronales, pero al preguntar, nos dimos cuenta de que no era así, sino que por ser Sábado, los comárquenos – aquellos que residen en los pueblitos  y comarcas que rodean la ciudad, bajan a la metrópolis, dándole alegría y haciendo sus compras semanales.
Esto también, es TURISMO.

Pudimos observar en nuestro recorrido, que las calles principales, no solo del centro de la ciudad, sino de sus barrios, se ven atestados de ventas, lo cual, la Municipalidad tendrá que ordenar, antes que se conviertan en otro inmenso Mercado Oriental, ese incontrolable mercado que absorbe calles en la ciudad de Managua.

Pero no quiero salir de León, sin antes hacer una petición a su fuerza empresarial y en particular a ese ejemplar coterráneo leones, Ramiro Ortiz Gurdian, quien através de su fundación  familiar y esfuerzos propios ha legado a su amado pueblo,  obras de arte, Museos, un acogedor Hotel, El Convento, y la restauración del arte que exhibe su vieja Catedral Metropolitana, que esta pidiendo a gritos una restauración, la cual podemos hacer realidad con el aporte de todos los que amamos a ese pueblo inmortal.

La histórica y amada Catedral, patrimonio de la humanidad, es donde reposan los restos del inmortal RUBÉN DARÍO, quien en su universalidad, escribiera  el Poema PAX, que leyera en ocasión del Día de Acción de Gracias, en Nueva York, del cual extraemos las siguientes líneas:

“Ya lucharon bastante los distinguidos abuelos, por Patria y Libertad ……No; no dejéis que el odio dispare su flecha; llevad a los altares de la paz, miel y rosas.
Paz a la inmensa America. Paz en nombre de Dios…..”

FELIZ DIA DE ACCIÓN DE GRACIAS! HAPPY THANKSGIVING DAY!

Hasta la próxima semana con EL ARCHIVO CXVI.

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