Redacción.-Los que tomamos la pluma o el ordenador, como le llamamos a la vieja máquina de escribir, lo hacemos conscientes de que cada frase conlleva una inmensa responsabilidad, ya que al salir ya no es nuestra, pertenece a quien la lee y como tal,  la analiza, usa o desusa a su buen entender.

A pesar de estar bajo tratamiento cardiovascular, donde las reacciones hay que mantenerlas, como el cuerpo, a baja temperatura, no he podido dejar desapercibida la noticia sobre que el futuro de Nicaragua, en cuanto a política se refiere, ha estado planificado y trazado por años, por quienes parten y reparten, o sea los “politiqueros” criollos.

Por lo tanto, si queremos seguir perteneciendo a Centroamérica, como una de sus Repúblicas responsables, o sea ser parte de su progreso y crecimiento económico y no el problema o causa de su estancamiento y atraso, Nicaragua tendrá que despertar de su letargo.

Y aquí esta nuestra enigma, ya que las noticias nos confirman que los “politiqueros” no les interesa eso de la  honestidad administrativa, del respeto a la Constitución Política o la Independencia de los Poderes del Estado, para evitar que sus corruptas manos contaminen la justicia y las leyes que garantizan igualdad de oportunidades y respeto a los derechos ciudadanos. No, esa no es su forma de hacer gobierno. Ellos han “pactado” para que todo lo que estorbe, desaparezca.

Entonces, que hacer, pues, hablando en el lenguaje popular nica, fajarse los pantalones, comenzar a tomar responsabilidad de nuestros actos, cumplir con las obligaciones ciudadanas a nivel de nuestros vecindarios, tales como mantener limpio el ambiente habitacional, casa por casa, cuadra por cuadra, organizarnos a nivel parroquial para velar por el bienestar de nuestra niñez, su escolaridad y su salud, en otros palabras, si el gobierno y los políticos abandonan su responsabilidad, tomarla y ejercerla con la ayuda de nuestras  Iglesias y clubes de servicio.

Lo mismo se debe hacer en el exterior y es por eso que el titular dice que “llego la hora”, pues bien, hace ya unos años, en la región de Nueva York, un grupo de la Diáspora Centroamericana , decidió unirse a celebrar el mes de las fiestas patrias (Septiembre), con resultados exitosos. Este ejemplo debemos de aprovecharlo en todos los Estados, ya que Comités, como el CICA de Nueva York, pueden convertirse en las organizaciones que  necesitamos para salir del letargo que no ha permitido a la Diáspora Nicaragüense, unificarse.

La historia centroamericana nos enseña, que siempre se ha recurrido a la unión para salvar a los países quienes han caído en las garras de gobiernos y políticos corruptos, lo mismo podemos hacer los nativos centroamericanos que residimos en el exterior al unirnos, ya que de tajo, se apartan los intereses politiqueros de los diferentes Estados que forman esa UNIÓN.

¿Que tienen los  CENTROAMERICANOS para ofrecer al mundo? Una cultura milenaria y ancestral, que ha contribuido al desarrollo de su arte. Una humanidad dedicada al trabajo y la producción, con un sentido de ética y dignidad ejemplar.

En los países del mundo, donde se encuentra nuestra Diáspora Centroamericana, estos se han distinguido por su dedicación al trabajo y por su honestidad. No se escucha de guatemaltecos, salvadoreños, nicas, hondureños ticos o panameños, se habla de centroamericanos y eso tiene un valor inmenso que hay que aprovechar.

En EL ARCHIVO anterior mencionábamos la “marca centroamericana” en cuanto a nuestra promoción turística con Europa, pero la UNIÓN es mucho más que una marca, es la unificación de una fuerza laboral con prestigio a nivel mundial, es la fuerza ciudadana de millones de seres que han demostrado con su ética y dignidad ser dignos del respeto y admiración de los países que los han acogido.

Es con esa UNIÓN de valores, que no solo puede nuestra Diáspora Centroamericana, reclamar sus derechos a nivel interno de los lugares que han fincado sus esperanzas y la de sus hijos, sino que influir en que se respeten los derechos de los conciudadanos que residen en sus países de origen, ya que sus remesas monetarias, no solo benefician a sus familiares, sino que forman parte del presupuesto burocrático de los Gobiernos.

Hasta la próxima semana, con EL ARCHIVO XCVI.