liberado al recluso, pero habría dejado la sentencia en vigor ya que se trata de una condena por delitos de lesa humanidad. El Hábeas Corpus permite interpretaciones y puede anular todo el proceso judicial.

La petición del Hábeas Corpus se basa en la supuesta parcialización de la corte que tuvo lugar en la segunda instancia, cuando el exmandatario recibió su condena de 25 años de prisión por 25 asesinatos y dos secuestros. Los juristas comentan que, a pesar de las expectativas de los fujimoristas, el beneficio, en teoría, habría podido tener efecto solo sobre la sentencia de esta segunda instancia, mientras que la primera sentencia, emitida en 2009, seguiría vigente. Con lo que Fujimori debería esperar preso un nuevo dictamen.

El Ministerio de Justicia de Perú informa de que no hay ningún procedimiento formal de indulto. Los expertos subrayan que la legislación internacional prohíbe indultar a los condenados por delitos de lesa humanidad.

Por su parte, el Instituto de Enfermedades Neoplásicas comunica que no había sido requerido para emitir dictamen sobre el estado de salud del recluso.

El presidente del Tribunal Constitucional, Carlos Mesía Ramírez, comentó que ya existe un proyecto de resolución sobre el Hábeas Corpus para Fujimori, pero será anunciado "después del proceso electoral".

El diario La República opina que este escenario está contra los intereses del fujimorismo. Necesitan, en cambio, una solución rápida. En caso de que después de la segunda ronda llegue al poder Ollanta Humala, los planes de liberación serán obstaculizados ya que el candidato nacionalista encabezó en su época un alzamiento contra el Gobierno de Fujimori. En caso de ganar Keiko Fujimori, la situación tampoco será muy favorable: si ella opta por apoyar la campaña, se expondrá a contradicciones explícitas con sus últimas declaraciones.