Ciudad del Vaticano.- La crisis diplomática entre El Vaticano e Irlanda por el tema de la pederastia clerical llegó hoy a su punto más alto cuando la Sede Apostólica llamó a consultas a su embajador en Dublín, Giuseppe Leanza.
En un breve comunicado la sala de prensa vaticana informó que la convocatoria del nuncio (nombre de los embajadores papales) se dio a causa de la publicación de un reporte de una comisión especial sobre las denuncias de abusos contra menores en la diócesis de Cloyne.
Agregó que, "sobre todo", el llamado a Leanza estuvo motivado por las "reacciones" que siguieron a la difusión del informe el 13 de julio pasado y que incluyó denuncias de pedofilia entre 1996 y 2009 contra 19 sacerdotes en Cloyne, al sur del país.
La nota se refirió a las palabras del primer ministro irlandés, Edna Kenny, quien intervino el 20 de julio en el
Parlamento y acusó abiertamente a la Sede Apostólica de "intentar obstruir una investigación en una República soberana y democrática".
El jefe del gobierno irlandés basó su intervención sobre algunos documentos incluidos en el Reporte Cloyne según los cuales El Vaticano habría desaconsejado a los obispos denunciar a la autoridad civil a supuestos sacerdotes pederastas.
Asimismo el gobierno irlandés propuso obligar a todos los prelados a denunciar, incluso cuando se viole el secreto de confesión, iniciativa considerada como inaceptable por la Iglesia católica.
El vicedirector de la sala de prensa vaticana, Ciro Benedettini, estableció que "la convocatoria del nuncio, siendo una medida que raramente la Santa Sede usa, denota la seriedad de la situación, la voluntad de afrontarla con objetividad y determinación".
Estableció que el gesto también expresó "una cierta nota de sorpresa y tristeza por algunas reacciones excesivas". Empero apuntó que el llamado "debe ser interpretado en la línea de una voluntad finalizada a una seria y concreta colaboración".
"Se trata de una decisión que tiene como objetivo principal una consulta con quien trabaja en la Secretaría de Estado y otras secciones involucradas, al fin de preparar la respuesta oficial de la Santa Sede al gobierno irlandés", añadió.
De hecho ya el vocero papal, Federico Lombardi, había anunciado que El Vaticano iba a responder oficialmente a la propuesta de ignorar el secreto de confesión en la denuncia a la autoridad civil de pederastas.
Según trascendió la Congregación para la Doctrina de la Fe trabaja en estos días en un documento para responder a los cuestionamientos irlandeses.
Gerardo Barboza, M.Ed.
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