Además, define un proceso más práctico para la aplicación del silencio positivo, entendiéndose como tal, el dar como aprobado un trámite cuando se cumple el plazo de resolución, siempre y cuando se haya cumplido con todos los requisitos.

Asimismo, establece que los entes autónomos, semiautónomos o con autonomía universitaria, que deseen emitir nuevas regulaciones o reformas que contengan trámites requeridos a los ciudadanos, consultarán al MEIC como órgano rector, la conformidad de éstas con la Ley N° 8220 y su reglamento y el criterio que vierta el MEIC para estos casos, será con carácter de recomendación.

El MEIC trabajó  de la mano  con la Comisión de Jurídicos y en el proceso se logró el consenso con todas las fuerzas políticas representadas Comisión.

“Teníamos una ley basada en el principio de la buena fe, y gracias a los señores y señoras diputados, hoy tenemos un instrumento jurídico, sólido y efectivo, que nos permitirá lograr avances significativos en la gestión que hemos venido desarrollando  en materia de simplificación de trámites en procura de mejorar los índices de competitividad de nuestro país”, afirmó la Ministra de Economía, Industria y Comercio, Mayi Antillón.

Asimismo, la jerarca agregó que está muy complacida con la gestión realizada con los señores y señoras diputadas, que aunado al reciente convenio firmado con el Banco Mundial para introducir la metodología del “Doing Business”, permitirá lograr  avanzar en las metas establecidas por el Gobierno de la República dentro de su estrategia de Mejora Regulatoria.

A partir de la promulgación de esta Ley, el MEIC avanzará en la brevedad posible en la elaboración del reglamento que permite asegurar un aprovechamiento efectivo por parte del administrado de los mecanismos establecidos en la misma.