El Gobierno de Paraguay defendió su derecho a limitar la tenencia de tierras por parte de ciudadanos extranjeros en zonas de frontera, en un radio de 50 kilómetros. Las autoridades de ese país descartaron que la norma frene la llegada de inversiones.
El asesor jurídico de la Presidencia paraguaya, Emilio Camacho, salió al cruce de las críticas que se intensificaron en los últimos días y afirmó que una legislación similar existe en todos los países vecinos.
Según declaró el funcionario, esta determinación corresponde a la Ley de Seguridad Fronteriza, que data de 2005, cuyo decreto reglamentario fue emitido por el presidente, Fernando Lugo, el pasado 25 de octubre.
El mandatario entonces apeló a la necesidad de que en Paraguay se aborde el problema de la tenencia de la tierra. Algunos expertos señalan que este paso, que ya fue dado en
varias naciones de la región, es de vital importancia para lograr el ejercicio pleno de su soberanía.
Además de ser un paso hacia la soberanía del país, la nueva ley podría ayudar a combatir el tráfico de drogas.
"La iniciativa del presidente Lugo es una buena medida en términos de garantizar la soberanía del país. Algunos gobiernos de América Latina están tomando ese tipo de medidas para evitar el lavado de dinero de la droga. Entonces, eso podría ser una forma de parte del Estado de tener el control de lo que pasa en su propio territorio", comenta Francisco Acosta, asesor del Consejo sobre Asuntos Hemisféricos.
Recientemente, el Congreso argentino aprobó un proyecto de ley que limita la compra de tierras por parte de extranjeros.
El analista político Juan Pablo Gambandé señala que con esta norma, Argentina "sería menos dependiente del capital extranjero", pero que no influirá en la inversión foránea.
La propuesta está inspirada en las legislaciones de varios países del primer mundo.
Gerardo Barboza, M.Ed.
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