No solamente es Montealegre

“En segundo lugar, él (César Zamora) habla de que nosotros (los OSC) no deberíamos interferir en los arreglos entre Eduardo Montealegre y el FSLN. Yo creo que aquí no es sólo el señor Montealegre, sino que se trata de buscar una salida a la crisis de institucionalidad del país.

Nosotros no estamos en contra de que hablemos todos los nicaragüenses para encontrar una salida en apego a la ley. Lo que estamos advirtiendo y vamos a seguir advirtiendo, aunque les moleste a algunos, es que no se puede seguir pretendiendo arreglar los problemas de Nicaragua a espaldas de la gente y con arreglos de cúpulas que no necesariamente reflejan las aspiraciones del pueblo de Nicaragua ni resuelven de fondo los problemas”, manifestó Violeta Granera.

Dijo que “cualquier conversación o diálogo que sea con las cartas sobre la mesa y para buscar resolver los problemas del país -el primer gran problema sigue siendo el fraude electoral y todas sus consecuencias- nosotros no sólo no lo impedimos, sino que hemos participado, hemos promovido, hemos intentado.

El último fue el de Metrocentro II, hace 2 años (2009) que muestren y prueban que hay voluntad de parte de las OSC de que la clase política dialogue, pero de cara a la gente, con transparencia y de acuerdo con sus necesidades e intereses”.  “Así que yo creo que César está un poco desubicado. Probablemente lo agarraron en un mal momento. Además, creo que eso refleja también, un poquito, esa dicotomía artificial que quieren hacer algunos empresarios entre los problemas políticos e institucionales y los problemas económicos”, expresó.